Compartir:

Es latente la preocupación por parte de la Guardia Ambiental en la ciudad que advierte que posiblemente la llegada masiva de venezolanos estaría ocasionando afectaciones de tipo ambiental en sectores como las faldas de La Popa. Los incendios forestales se están convirtiendo en una amenaza diaria en este sector de la ciudad.

Según el director de la Guardia Ambiental, Roberto Ruiz, detrás de estos hechos que alteran la tranquilidad estarían ciudadanos venezolanos. El funcionario aseguró que las investigaciones se vienen adelantando y, se ha logrado establecer, que algunos inescrupulosos que residen en el cerro le ofrecen a las familias de migrantes venezolanos terrenos para que se puedan instalar sus cambuches.

Las alarmas se han encendido, según el funcionario, porque además de la zona del cerro de La Popa, se tendrían identificadas otras zonas que han sido consideradas de alto riesgo y que, al igual que las faldas del cerro, están siendo invadidos por ciudadanos venezolanos.

'El problema de Venezuela ya tocó la parte ambiental en esta zona de la región. Hay que prestarle atención a esta situación porque los delitos ambientales que antes eran cometidos por los nativos, ahora los están cometiendo personas de origen venezolano', apuntó.

Estos ciudadanos, según Ruiz, comienzan a hacer quemas de manera indiscriminada afectando entre otras zonas que pueden ser reservas y acondicionar sus residencias en sitios considerado de alto riesgo.

'Esta situación la hemos evidenciado en zonas de manglar como en el caño Juan Angola', expresó.