En una encrucijada se encuentra el Distrito de Cartagena a solo tres días para que se cumpla el plazo que tiene y que emana de un fallo de tutela de 2009, que ordena al municipio a trasladar de lugar a la cárcel de mujeres de San Diego, debido a los problemas de infraestructura que presenta esta edificación que en el pasado fue hospital, un convento y un sanatorio mental, pero hasta el momento el lugar sigue sin definirse, y depende más de una decisión de orden nacional que local.
Durante su mandato la alcaldesa (e) Yolanda Wong Baldiris se negó a realizar el traslado provisional del centro penitenciario, hasta el antiguo colegio Caribe Real, ubicado en el barrio Beirut, en el suroccidente de la ciudad, tras el rechazo de la comunidad, que aduce que el sitio no cuenta con las condiciones necesarias para brindarle seguridad a unas 153 reclusas, y los vecinos del sector.
Y es que varios sitios en diferentes sectores de la ciudad han sido mencionadas como posibles opciones para el traslado de la Cárcel de San Diego, entre los que se cuentan un colegio en desuso, un terreno cercano a Turbaco y un lote ubicado en el barrio El Pozón, que está en un pleito jurídico. Sin embargo, ninguno de estos sitios ha pasado los controles y los requerimientos para obtener el aval de la Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios, Uspec.
Así mismo, el alcalde Pedrito Pereira Caballero explicó que los requerimientos técnicos para el traslado de la cárcel son bastantes exigentes, entre ellos que el lote sea de 10 hectáreas y que cuente además con servicios públicos básicos.
