Es como una tragedia ecológica anunciada de todos los años la mortandad de peces en los cuerpos de agua de Cartagena.
Sin embargo, el ambientalista y exdirector de la Entidad Pública Ambiental de Cartagena, EPA, Rafael Vergara, asegura que esta vez la proporción del desastre es mayor a la de otros años.
Desde el pasado fin de semana se ha ido incrementando el número de alevinos muertos en las orillas de los cuerpos de agua de la ciudad, produciendo no solo una impactante escena desoladora, sino generando fuerte olores en los alrededores de estas zonas.
De acuerdo al balance, se presentan peces muertos en el caño de Juan Angola, cerca de Chambacú; en la zona suroriental por la ciénaga de La Virgen, en inmediaciones de los barrios periféricos de El Pozón y Villa Estrella.
Álvaro Vargas, actual director del EPA Cartagena dijo que, además de las fuertes temperaturas, uno de los causantes de esta mortandad de peces es la contaminación que registran los cuerpos de agua.
Pidió a la ciudadanía no lanzar residuos a los cuerpos de agua, 'tenemos que evitar que más escombros lleguen a los caños y ciénagas que tiene la ciudad'.
Sostuvo que, desde el pasado fin de semana, se trabaja con personal de la Guardia Ambiental del Distrito para remover la capa que forman los alevinos muertos en las orillas de los cuerpos de agua.
Sostuvo que para esta época se registra el desplazamiento de cardúmenes por el mar y que el intenso verano y poco oxígeno que tienen, provoca esta tragedia ecológica. Pidió a los cartageneros y turistas abstenerse de contaminar los mangles lanzando plásticos y otros residuos, nocivos para el ecosistema.
Por su parte, el ecologista Vergara dijo que –en este desastre que se ha vuelto periódico– influyen variantes que tienen que ver tanto con las condiciones climáticas adversas como 'la irresponsabilidad de la ciudadanía'.
'Esta vez es más preocupante el asunto porque la mortandad de peces se ha multiplicado en distintos puntos de la ciudad, en Juan Angola, en la zona de la unión, por Chambacú; luego en la zona del caño paralelo; en El Pozón; en Villa Estrella', sostuvo.
Para él, el golpe de calor de esta temporada tiene una poderosas incidencia en los daños ambientales que se registran.
Explicó que las aguas no se están moviendo y que, además, se registra un verano fuerte. Sumando a esto, la presencia de mucha materia orgánica en descomposición provoca que se agote el oxígeno en las aguas de los caños y ciénagas y los peces mueran.
'El sol está pegando directo sobre el agua y esto es letal para los peces. Hay que tener en cuenta también que muchas zonas de manglar fueron taladas y todo eso hace que den estas situaciones críticas', agregó.
Insistió en que no se puede seguir contaminando ni destrozando los cuerpos de agua. 'Cada acción humana si no es medida, si es extrema, genera consecuencias inmediatas, como las que se están viviendo en Cartagena', dijo el ambientalista.
