La embarcación ‘Susurro’ que arribó a Cartagena procedente de San Andrés con cinco de sus siete tripulantes positivos para COVID-19 fue cambiada del sitio en donde inicialmente estaba fondeada por 'dificultades con la población aledaña', declaró la directora (e) del Dadis, Johana Bueno.
A través de un video, la funcionaria explicó que en la zona de zarpe a donde fue trasladada no representa peligro. 'Es un lugar donde se va a facilitar la segunda toma de muestras que se coordina con un laboratorio', explicó.
El buque de cabotaje ‘Susurro’, de bandera colombiana, había quedado fondeada en el sector de ‘Cuatro Calles’, en la bahía interna de Cartagena, en donde iba a cumplir la cuarentena estipulada por el Ministerio de Salud.
Según la Dirección Marítima, la zona donde está fondeada inicialmente había sido establecida por la Capitanía de Puerto de Cartagena como un lugar seguro, alejado de las comunidades insulares de Punta Arena, Tierrabomba, Caño del Oro y Bocachica, y de la capital de Bolívar.
La motonave está siendo custodiada las 24 horas por lanchas de la Estación de Guardacostas de la Armada Nacional hasta que las autoridades sanitarias determinen la finalización de la cuarentena de sus tripulantes.