Ni los vecinos del polémico edificio Aquarela, cercano al Centro Histórico de Cartagena, se han quejado del proceso de desmonte de la estructura que ya completa un mes, y sí lo hizo la constructora Promotora 47.
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Así lo denunció la Empresa de Desarrollo Urbano de Bolívar y Cartagena (Edurbe) al desmentir que los vecinos de la zona estén preocupados por los trabajos que allí se realizan.
'Es falso que la obra se esté haciendo con altos riesgos sociales y ambientales, y mucho menos se está generando ruido. Precisamente, el método quirúrgico con el que se demuele, piso a piso, para así no afectar a las propiedades cercanas y al Castillo San Felipe, ha generado que algunos piensen que el proceso marcha lento. Por ende, es ilógico lo que denuncia la constructora', indicó Fanny Guerrero, gerente general de Edurbe.
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La funcionaria invitó a cualquier ciudadano que tenga algún reparo sobre la obra a exponerla con el equipo de Atila, que es la empresa que demuele el edificio, o en las oficinas, canales o redes sociales de Edurbe.
Precisó Guerrero que, como toda obra civil, sobre todo una demolición como esta, 'obviamente habrá cierto polvo que los fuertes vientos del sector lleven a algunas propiedades cercanas, pero esto no es algo constante o frecuente, y, además, esto fue socializado en todas las actas de vecindad, en conversaciones con la comunidad del área de influencia y con la opinión local, nacional e internacional'.
Anunció que los cerramientos de la obra serán reforzados para evitar que partículas de escombros caigan al exterior de esta. Es de anotar que esos escombros están siendo aprovechados.
