La familia de Leonardo De Jesús López Ballesteros vive momentos de angustia e incertidumbre tras la trágica muerte del joven de 20 años, cuyo cuerpo fue hallado en un potrero del municipio de Turbaco, Bolívar. Su desaparición fue reportada la noche del pasado martes, 17 de diciembre, cuando no regresó a su hogar en el barrio San José de Los Campanos, en Cartagena.
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Según narraron sus familiares, Leonardo salió de su casa el martes, pero no volvió en el horario habitual. Su madre y su pareja sentimental comenzaron a preocuparse al caer la noche, pues no era común que el joven estuviera fuera sin avisar.
Ante la falta de noticias, al día siguiente la familia inició una intensa búsqueda por hospitales, clínicas y la morgue, con la esperanza de encontrar alguna pista que los condujera a Leonardo. Sin embargo, sus esfuerzos no dieron resultados.
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Finalmente, una fotografía enviada por un conocido confirmó lo que más temían: Leonardo había sido encontrado sin vida en un potrero en Turbaco.
La imagen del cuerpo fue un golpe devastador para su madre, quien afirmó no entender las razones detrás de este hecho. “Me enviaron una foto de su cuerpo; así supe que estaba muerto”, relató.
Sin respuestas claras
Leonardo era el menor de cinco hermanos y trabajaba como pintor de casas junto a uno de ellos. Según su familia, no tenía problemas ni enemigos conocidos. Su madre aseguró que su hijo era una persona trabajadora y sin antecedentes de conflictos.
“La Policía no nos ha dicho nada, él no tenía problemas ni amenazas, era un muchacho trabajado”, añadió.
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La familia, en medio del dolor, exige respuestas a las autoridades, quienes hasta el momento no han emitido un comunicado oficial sobre lo ocurrido ni han entregado información que permita esclarecer las circunstancias de su muerte o identificar a los responsables.
El cuerpo de Leonardo fue hallado en circunstancias que aún no han sido esclarecidas. El potrero donde fue encontrado se ubica en una zona apartada, lo que complica el rastreo de testigos o pruebas inmediatas.
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Por su parte, los vecinos del barrio San José de Los Campanos se han solidarizado con la familia, quienes ahora enfrentan un proceso de duelo marcado por la incertidumbre y el dolor.
