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Hoy se presenta álgido debate entre comerciantes, abogados, juristas, académicos, civilistas y expertos en comercio sobre el proyecto de ley que se debate en el Congreso de Colombia sobre la unificación del código civil con el código de Comercio.

Y, no es para menos, pues el Código de Comercio –Decreto 410 de 1971– nace con el propósito de regular a los comerciantes en todo lo que tenga que ver con sus acciones de comercio. Esto quiere decir que es un derecho consuetudinario que indica que tiene mucho de las costumbres como se venían haciendo las cosas antes que el congreso decidiera debatir y aprobar un código para regular a los comerciantes. Así las cosas, no deja de ser curioso pues desde hace 50 años regula a los comerciantes del país dejando un alto grado de satisfacción entre ellos.

De hecho, dentro del eterno debate que ha suscitado desde que nació a la vida jurídica todo ha girado a la discusión sobre lo regulado en el artículo 824 en relación a la consensualidad para el perfeccionamiento de dichos contratos mercantiles, pero no aclara sobre si excluye o no la aplicación de las normas del código civil que consagran las formalidades para ciertos contratos como lo estipulado en el artículo 1602 donde se afirma que el contrato es ley para las partes.

En síntesis, acorde a lo anterior, el artículo 1602 del Código Civil, el contrato se constituye en ley para las partes y, por virtud del artículo 1494 del mismo código, es fuente de obligaciones, y enfatiza que estas obligaciones son para cumplirlas. Quiere decir que el código civil colombiano es fuente del código de comercio en especial en que el contrato es ley para las partes en materia civil o en materia comercial.

Para concluir, no pensar –como se hace hoy en el Congreso– en la unificación de estos dos códigos, sino en debatir y entregarnos un nuevo código civil acorde al avance de todo lo que rodea a los colombianos y que una ley creada hace 134 años para regir a los civiles de una nación ya debería estar guardada como una reliquia.

Luis Hernán Tabares Agudelo