De los muchachos de la cuadra conservo amistad con uno que es hoy senador en los EE. UU. Mérito, que a mi juicio, aunque su padre fue concejal de Barranquilla por varios períodos, no tiene discusión.
Hace unos días me llamó para decirme algo que a pesar de parecer inverosímil , me toca digerirlo como si fuera verdad.
“Nacho, me dijo, imagínate que hace unos días al salir con algunos colegas de la Casa Blanca, después de sostener una reunión con nuestro nuevo presidente, llamé a Aracelis para decirle que iría a cenar con algunos colegas a la casa.
Le pedí que por respeto a las nuevas medidas adoptadas por el gobierno, guardara en el garaje todos los artefactos que no estuvieran rotulados con el Made in USA .
Al llegar, me sorprendió que las ventanas y las puertas habían sido retiradas de su lugar. Que no había adornos, ni electrodomésticos, incluyendo los computadores y el televisor.
Mis amigos pensaron que durante mi ausencia, algún inmigrante latino ( amigo de lo ajeno) había visitado el lugar.
Asombrado, me dirigí a la cocina a indagar. ¡Oh! Sorpresa...encontré a mi mujer completamente desnuda preparando unos hot dog a punta de leña y carbón.
¡Te volviste loca Aracelis ! Le dije, ¡Para nada ! me contestó
Órdenes son órdenes, y solo por complacerte, hay que cumplirlas con rigor.
Ignacio Consuegra B.