A mediados de los 50, quienes gustamos de la música popular quedamos gratamente sorprendidos por la aparición de una nueva voz romántica, como fue la de Andrés Rábago Pérez, más conocido como Andy Rusell. No era una voz más por lo agradable, sino por su agradable canto en español con pronunciado acento inglés. Y eso se explicaba porque desde niño había vivido e iniciado su carrera artística en el oriente de Los Ángeles. Sus padres eran mexicanos. Cantaba en inglés y en español. Sus primeras actuaciones las hizo en el cine norteamericano al lado de grandes figuras del canto y del celuloide, como Frank Sinatra, a quien en algún momento llegó a reemplazar.
Este 16 de setiembre Andy Russell completaría el centenario de su natalicio acaecido en 1917 en Los Ángeles. Solo cuando en los 50 su figura de cantante y actor apareciera en las películas mexicanas y en los discos que grabó en el desaparecido sello RCA Víctor, fue cuando ingresó en ese mundo romántico del bolero y de la balada. Éxitos como Contigo en la distancia, Amor y Bésame mucho, lo agregaron acertadamente en estos géneros de la música latinoamericana.
Saludamos el centenario de Andy Russell, estrella que hoy ocupa un lugar privilegiado en el firmamento de los grandes artistas de la canción romántica.
José Portaccio Fontalvo
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