"En lo personal existen dos contraposiciones que me perturban: ¿cómo ser un santo en un mundo de demonios? Y ¿qué es lo que genera la maldad en el ser humano? El primero no lo solventaré, aun cuando sé, que alimentaré en algunos la soberbia. En cuanto al otro apartado; lo que despierta esa agresividad, es el momento en el que inicialmente decimos: "esto es mío", la propiedad.
Y esa es nuestra mayor condena, nos hacemos acreedores de todo, incluso hasta de las sonrisas de los demás. En esta ocasión, el "Fracking" saquea todas las miradas. Puesto que, es una técnica que permite extraer el llamado gas de esquito, un tipo de hidrocarburo no convencional que se encuentra literalmente atrapado en capas de roca, a gran profundidad. La que por ende, dadas las circunstancias tiene numerosos detractores. Dado que, trae consigo riesgos para el medio ambiente y la salud, como: la contaminación del agua, terremotos y fugas de gas metano. Un dato no menor el cual no me permitiré omitir, es que tal exploración tiene enormes presiones económicas y financieras. Las cuales son financiadas indudablemente por la suscripción mensual que debemos abonar al país donde vivimos. O dicho en otras palabras por los "Impuestos" donde la consigna; es no deber a nadie ni una sola cosa, salvo el amarse unos a otros. Ya que, por consiguiente, no somos dueños absolutamente de nada..."
Thiago Bettin.
