Más de cuatro horas duró la indagatoria que le hizo la Fiscalía Especializada de Derechos Humanos al gerente de Relaciones con la Comunidad de la empresa Drummond en Cesar, Santander Alfredo Araújo, por la investigación que se adelanta por presuntamente estar vinculado en el asesinato de dos directivos sindicales ocurrida en el 2001.
Araújo ingresó a las 11:10 de la mañana al despacho para iniciar la diligencia coordinada por una fiscal de Bogotá.
Tal como ocurrió al entrar a la indagatoria, a su salida a las 4:20 de la tarde el directivo de la empresa minera guardó silencio al no responder a las preguntas de los periodistas y se dirigió a una camioneta mientras era escoltado por efectivos de la Dijín para ser trasladado al Comando de la Policía Cesar, donde permanece detenido.
La oficina de comunicaciones de la Fiscalía informó que no podía entregar detalles a la opinión pública sobre el resultado de esta indagatoria hasta que la fiscal encargada en el proceso defina si le dicta medida de aseguramiento o no a Araújo.
Su hermano Hernán Araujo se refirió a la orden de captura en contra de su pariente y considera que no era necesario el arresto y que simplemente debían solicitarlo a que rindiera indagatoria. 'Cuando una persona considera que es inocente, como de hecho lo es, le da mucha tranquilidad. Hay momentos difíciles. Él está confiado en su verdad. Y espera que pueda demostrarlo', dijo.
A Araújo lo relacionan con la muerte de los sindicalistas Valmore Locarno y Víctor Orcasita, quienes trabajaron como operadores en la Drummond y se oponían a un contrato de alimentación a los empleados porque consideraban que había un mal servicio. Los crímenes fueron ejecutados por el Bloque Norte de las AUC.
