La familia de Santiago, el ‘Superbebé’ de Codazzi (Cesar), uno de los niños más obesos del país, no solo tiene una lucha contra el sobrepeso del pequeño, sino con la EPS Comparta, que según su mamá Eunice Fandiño, desde diciembre pasado cuando recibió la orden de unas terapias para bajar los kilos de más, ha sido imposible que la entidad le responda.
A los 6 meses Santiago pesaba 18 kilos y tuvo que ser remitido por la Fundación ‘Gorditos de Corazón’ a Dinamarca, Europa, para su tratamiento, pero se ha estancado en el proceso. No camina, y a sus 22 meses actuales sigue pesando más que otro niño normal de su edad.
'Con el tratamiento de especialistas bajó tres kilos de los que inicialmente tenía, pero aunque ahora tiene más edad, se estancó', sostuvo.
Santiago debe consumir verduras, frutas y pescado, pechuga de pollo o carne sin grasa, pero con una economía precaria como la de su familia (el padre es mototaxista y la madre es ama de casa) es muy difícil seguir el tratamiento.
'Mientras él tenga la mente ocupada no molesta por comida', señala Eunice, que hace lo posible por entretenerlo, mientras llega la orden de la EPS para someterlo a hidroterapias y un tratamiento para que siga bajando de peso. 'A veces no puedo con él, no camina y me toca tenerlo cargado', señaló Eunice.
La EPS Comparta no responde. 'Creo que hay personas muy negligentes, me dicen que vaya a Becerril o Valledupar, yo no tengo recursos y a duras penas conseguimos para alimentar con su dieta a Santiago, recurro a todas las entidades para que me ayuden', precisó.
Eunice es madre cabeza de hogar porque su esposo tiene insuficiencia renal crónica.
EL HERALDO intentó comunicarse en Valledupar con la EPS Comparta para conocer su posición frente a este caso, pero informaron que la representación de la empresa se encuentra en Bucaramanga. No obstante, al insistir transfirieron las llamadas al área de autorizaciones, pero al final contestó una grabación indicando que todas las líneas estaban ocupadas.