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'El control físico urbano ha sido deficiente por parte de la Alcaldía de Valledupar', dijo el personero de este municipio, Alfonso Campo Martínez, al lanzar una advertencia sobre el crecimiento de las construcciones ilegales en esta capital.

Se trata, según denuncia de la Curaduría, de obras que no cuentan con licencias, ni los pagos de los impuestos correspondientes, y sin embargo, siguen en marcha; lo peor -señala- es que algunas que fueron selladas, terminaron consrtuyéndose sin que existan multas, demoliciones o la recuperación del espacio público. 'Eso no se puede permitir', afirmó el funcionario.

De acuerdo con el curador urbano No 1, Augusto Orozco, la ilegalidad en las construcciones urbanas aumentó en Valledupar del 65 al 95%, situación que fue denunciada ante el procurador general de la Nación, Fernando Carrillo, durante una reciente audiencia pública en la ciudad. 'No pagan la obligación correspondiente al impuesto de delineación, ni las licencias urbanísticas', sostuvo.

'Hoy hacemos de manera preventiva un llamado al señor alcalde de Valledupar para que tome los correctivos al interior de su administración y de manera externa, de acuerdo con lo que contempla el Código Nacional de Policía. No podemos tener una ciudad amparada en construcciones de la ilegalidad, tenemos que propender por un municipio planificado, donde existan los permisos, licencias y el control físico correspondientes', señaló el personero Campo.

De igual manera afirmó que 'los particulares que ejecuten obras sin las licencias correspondientes, se expondrán a las sanciones previstas en el Código Nacional de Policía, y quienes presenten licencias adulteradas o falsificadas responderán ante la justicia ordinaria por eventuales infracciones de carácter penal'.

Indicó que 'le solicitamos al Alcalde de manera urgente una mesa de trabajo con los curadores, Camacol, el Contralor municipal y la personería, para poder entrar a vigilar y revisar los casos concretos que se están dando en Valledupar'. Esto, según precisó, para evitar que se presenten tragedias como las de Blas de Lezo, en Cartagena.

El curador Orozco manifestó que en todo el municipio se observa la ilegalidad; pero principalmente en los desistimientos de licencias que han ocurrido en más de 600 en un año; y que a pesar de desistir, las obras terminan construyéndose por falta de un control físico efectivo en la ciudad.

'Obviamente se necesita que lo corrobore la misma administración a la que le delegaron la función de revisión urbanística y su control físico. El Alcalde en estos momentos a través del Código de Policía está obligado a nombrar inspectores para ejercer ese control con autoridad', señaló.

Dijo que 'nosotros creemos que todas estas denuncias están dadas en el momento crucial que está viviendo el país con relación a los accidentes y catástrofes que han suscitado en edificios como el Space, en Medellín; y Blas de Lezo, en Cartagena, y hay otras ciudades como Maicao, que también están relacionadas con construcciones propensas a caerse. La idea es entrar a revisar los procedimientos legales del control físico'.

El secretario de Planeación local, Aníbal Quiroz, reconoció su preocupación por el desorden urbanístico que tiene la ciudad, indicando que se están analizando con Camacol las cifras, después del nuevo Plan de Ordenamiento Territorial. 'Vemos con buenos ojos esta acción preventiva, este llamado a una mesa de trabajo, porque es importante que todos los actores concertemos una hoja de ruta, la administración municipal ha dado directrices para acompañar a estos inspectores que no tienen los equipos, ni los arquitectos, ni abogados adscritos que hagan efectivo el control'.

Anunció a los infractores que las multas están estipuladas en 150 millones de pesos, y que se iniciarán brigadas de revisión en la ciudad. 'Estamos haciendo un llamado para que la gente evite la cultura del atajo y se acoja a las normas', puntualizó.

Edificaciones en ruinas

El curador urbano No 1, Augusto Orozco, relacionó algunas de las edificaciones en ruinas, las cuales deberían ser demolidas, dadas los riesgos que representan para la población.

'Deberían demolerse porque pueden caerse en cualquier momento, se trata del cerramiento de la Villa Olímpica que está mostrando las grietas para caerse y que pude haber un desastre; el edificio en el antiguo lote de Electrificadora, al cual habría que hacerle un proceso de evaluación estructural y de no ser así demolerse, lo mismo el antiguo y devastado hospital de Los Mayales y la Galería para comerciantes, tenemos estas obras que se pueden caer y que no se están fiscalizando como debe ser', sostuvo.