Con un hacinamiento del 424% se encuentra la cárcel judicial de Valledupar. De una capacidad para 256 reclusos, en la actualidad alberga unos 1.083, según cifras de la Personería local. La situación mantiene en condiciones infrahumanas a los internos, muchos de los cuales tienen que dormir en los pasillos.
'Estas personas tienen que dormir en los pasillos y baños en espacios muy reducidos, es una infraestructura de varios años y las celdas no son adecuadas, se puede evidenciar 4 y 5 presos durmiendo en celdas que están diseñadas para una persona, lo que en muchas ocasiones generan riñas entre ellos', señaló el dragoneante Marlon Trillos, miembro del Sindicato de empleados Unidos Penitenciarios.
Trillos sostuvo que las autoridades a nivel nacional y territorial están alertadas sobre el hacinamiento en la cárcel. 'La respuesta es que la situación es de Gobierno, pero obviamente es responsabilidad de los entes territoriales y de las alcaldías porque la ley es clara en decir que los sindicados son responsabilidad de los municipios y hasta la fecha no hay municipio que se apersone, apoye o brinde solución.
'Es un problema que día a día se agrava porque cada vez se reciben nuevos internos, y sin duda alguna tenemos una carga laboral (...) por turnos de noche quedan 2 funcionarios para los 1.083 reclusos', explicó Trillos. Del total de internos, 362 se encuentran en calidad de condenados, lo que representa el 33.42%; el resto, 721, permanecen privados de la libertad como sindicados.
Ante la problemática el alcalde de Valledupar, Augusto Ramírez, y el gobernador del Cesar, Francisco Ovalle, le solicitaron al ministro de Justicia, Enrique Gil Botero, la reubicación del establecimiento.