Compartir:

En Villa Veneno, los olores a químicos que emanan de la tierra se sienten más fuertes cuando llueve o cuando el sol es intenso. En el lugar, habitan de manera permanente 14 familias, pero en total son más de 300, las que invadieron las antiguas instalaciones de la Federación Nacional de Algodoneros, donde llegó a funcionar el Instituto Técnico Agropecuario, en el municipio de Codazzi (Cesar). Allí quedaron enterrados tanques con plaguicidas que se usaban en la bonanza del algodón.

El terreno es inviable para habitar, pero estas 14 familias, con cartas de desplazados, respaldan que no tienen dónde vivir dignamente.

'Si tuviéramos una oportunidad de contar con mejores condiciones, hace rato nos hubiéramos ido de aquí, pero no tenemos para dónde coger', dijo uno de los lugareños.

Cambuches en la zona

Algunos ranchos están levantados con trozos de madera y plástico. Otros ya se construyen con ladrillo y cemento. El predio está parcelado, pero no todos viven allí.

'A veces sentimos ardor en los ojos y hasta dolor de cabeza', señaló una residente, madre de tres pequeños, que en medio de su inocencia juegan en los caminos destapados y entre la maleza que rodea el lugar y un estanque de aguas profundas. 'Los niños son los más afectados', dijo. Otros, tal vez para evitar ser desalojados, afirman que la situación es 'normal'.

Según la Consolidación del Inventario Nacional de Plaguicidas, en los 1.900 metros cuadrados del terreno, existen alrededor de 1.925 centímetros cúbicos de Dicloro Diifenil Tricloroetano y Toxafeno.

En el informe hecho por el Ministerio de Ambiente, quedó establecido que en el predio invadido por familias que dicen ser desplazadas, existe presencia de sustancias que representan alto riesgo para la salud.

Las autoridades

La Corporación Autónoma Regional del Cesar confirmó que ese lote está contaminado. 'Con estudios realizado hemos encontrado canecas con plaguicidas, eso hizo que nos pronunciáramos y vía resolución se le notificó a la Alcaldía de Codazzi que estos predios no eran aptos para la vida humana', sostuvo el director de la entidad Kaleb Villalobos.

El alcalde de Codazzi, Luis Peñaloza, indicó 'que existe un problema con los químicos en ese terreno, pero la gente no entiende eso; no podemos permitir las invasiones y menos en condiciones como estas donde el terreno es inviable'. Sostuvo que la situación se agudiza con la presencia de personas procedentes de Venezuela, que dicen ser colombianos, buscando asentamiento en estas zonas.

La comunidad hizo un llamado a la Defensoría del Pueblo, la Personería de Codazzi, a la Secretaría de Salud del Cesar y al Gobierno departamental, ante el riesgo de salud en que se encuentran estas personas, tras la constante exposición a los residuos tóxicos que se encuentran sepultados en el lugar.