El exjefe de sicarios del desarticulado cartel de Medellín, John Jairo Velásquez Vásquez, alias ‘Popeye’, fue ingresado la tarde de este lunes a la penitenciaría de Alta y Mediana Seguridad de Valledupar, conocida popularmente como ‘La Tramacúa’, a donde fue enviado por un juez de la capital antioqueña como presunto responsable de los delitos de concierto para delinquir y extorsión agravada, tras ser capturado el viernes anterior.
‘Popeye’ llegó a bordo de un avión de la Policía fuertemente custodiado al aeropuerto Alfonso López de Valledupar, vistiendo camiseta negra con un estampado y jean, de donde fue embarcado a una tanqueta blindada del escuadrón antidisturbios, Esmad, emprendiendo una caravana con patrullas policiales y unidades del Inpec, hasta el establecimiento carcelario.
Velásquez ya había estado interno en la penitenciaría de Valledupar. Entre 2001 y 2002, pagó 14 meses en este penal tras su traslado de La Modelo mientras cumplía los 23 años y tres meses que estuvo en prisión por sus crímenes. Según el mismo ‘Popeye’ esta ha sido una de las cárceles más 'duras' por las que ha pasado.
'Fueron 14 meses en la penitenciaría de Valledupar a 44 grados de temperatura, sin ventiladores ni nada, a pulmón libre, toda clase de plagas, es una locura de cárcel', dijo en una entrevista al referirse a La Tramacúa, una fortaleza con nueve torres, muros antiexplosivos y celdas a partir de un segundo piso para evitar túneles de fuga, construida con la asesoría del Buró Federal de Prisiones de los Estados Unidos, ubicada a 3.5 kilómetros de Valledupar, en la vía al corregimiento de La Mesa, al occidente de esta capital.
El confeso autor material de 300 asesinatos y coordinador de otros 3000, es el nuevo ‘huésped’ de la cárcel donde se encuentran los reclusos más peligrosos del país, entre ellos Luis Fernando Garavito, ‘La bestia’; El Monstruo de Tenerife, La bestia del Matadero, El Monstruo de los Cañaduzales y Cristian Camilo Bellón.
‘Popeye’ obtuvo su libertad condicional el 26 de agosto de 2014, cuando se encontraba prisionero en la cárcel de Cómbita, tras haber colaborado con la Justicia colombiana y pagado 9 millones de pesos (unos 4.500 dólares) de fianza. La decisión la tomó el Juzgado Primero de Ejecución de Penas de Tunja. Sin embargo, en las últimas horas un juez en Medellín decidió enviarlo nuevamente a prisión, investigado por el supuesto cobro de una extorsión de 55.000 dólares a una familia en la capital de Antioquia.
Según la Fiscalía, la captura de Popeye se da después de una investigación policial que incluye reconocimientos fotográficos y señalamientos de testigos, además de una supuesta alianza con una organización llamada ‘La Oficina’. Alias Popeye se declaró inocente de los delitos imputados por la Fiscalía, pero un juez de control de garantías decidió enviarlo a la cárcel de Valledupar
‘Rechazamos este tipo de traslado’
El secretario de Gobierno de Valledupar, Gonzalo Arzuza, rechazó el traslado de alias ‘Popeye’ a la penitenciaría de esta capital, e indicó que en repetidas oportunidades se le ha solicitado al Inpec bajar la categorización de esta cárcel donde se encuentran delincuentes de alto perfil y que generan inseguridad en la ciudad.
'La administración municipal se dirigirá esta semana al Gobierno Nacional para exigirle que se baje la categoría del penal, teniendo en cuenta que esta durante los últimos 20 años nos ha traído problemas de inseguridad. Nos engañaron en un principio, hace dos décadas, diciendo que era un establecimiento que venía a suplir los problemas carcelarios de Valledupar y nos trajeron una penitenciaría de máxima seguridad. Generalmente los presos más peligrosos se traen toda su infraestructura y entorno a las ciudades donde son trasladados, rechazamos contundentemente esto', puntualizó.