Las tradiciones y la cultura musical de la tierra del Cacique Upar, con sus juglares de leyenda y sus aires vallenatos en acordeón y guitarra, motivan a los turistas que quieran descubrir los misterios del género declarado Patrimonio Cultural e Inmaterial de la Humanidad.
Esta ruta hace parte de un paquete de los nuevos recorridos que se lanzaron en diferentes regiones del país, buscando que los colombianos y extranjeros visiten el territorio, conozcan su naturaleza y cultura, disfruten de su gastronomía y folclor, y vivan las experiencias únicas que les ofrece la geografía de este país.
'Con un mayor flujo de visitantes a las regiones, será posible dinamizar el turismo nacional y potenciar las economías locales durante la temporada de fin de año', informó el Ministerio de Industria y Comercio.
ATRACTIVOS NATURALES.
En la Sierra Nevada nace el río Guatapurí; el macizo además de ser el ‘recinto’ natural de las comunidades indígenas, especialmente del pueblo arhuaco que es el más grande con asentamiento en esas montañas, tiene cerca de Pueblo Bello, a Nabusímake, la capital espiritual de esta etnia; y sumados a ellos una gran variedad de fauna y flora, de paisajes, y hasta de mitos y leyendas, que se convierten en atractivos para propios y visitantes a este territorio.
Valledupar cuenta con el Centro Histórico que lo conforman ocho manzanas con edificaciones coloniales que datan de hace más de 400 años; en este sector se localiza la emblemática plaza Alfonso López, que tiene a un costado la Iglesia La Inmaculada Concepción, la de mayor concentración, especialmente en Semana Santa, al ser la casa del Ecce-Homo, patrono de los vallenatos.
El balneario de Hurtado en el río Guatapurí, con el monumento de La Sirena y un parque lineal, ahora con la primera playa artificial de Colombia, es el sitio donde más confluyen propios y visitantes. Muy cerca de allí están otros balnearios como el de La Mina, piscina natural que se forma en el río Badillo, a 40 kilómetros cerca a la vía que conduce al corregimiento de Atánquez.
También cuenta con el centro recreacional La Pedregosa, un escenario con piscinas, toboganes, canchas de fútbol, parques y hermosos paisajes, con zonas incluso para acampar. Igualmente se destaca como uno de los atractivos la Casa Museo del Acordeón, donde el compositor Alberto ‘Beto’ Murgas, conserva la historia del instrumento y los modelos, desde los primeros que llegaron a América hasta los actuales.
La ciudad igualmente se destaca por sus glorietas y avenidas adornadas con grandes monumentos. Así se encuentran algunas estructuras como El Obelisco; y esculturas como Mi Pedazo de Acordeón, Los Músicos, Cacique Upar, Los Poporos, María Mulata, La Pilonera Mayor, entre otros.
Valledupar está ubicada al norte del Cesar, entre la Sierra Nevada de Santa Marta y la Serranía del Perijá, al margen de los ríos Cesar y Guatapurí.
Pero no solo la capital y Pueblo Bello hacen parte de la ruta del turismo por el Cesar, también están los municipios de Manaure, La Paz, San Diego, La Jagua de Ibirico, Tamalameque, que atraen a cientos de visitantes. El departamento también cuenta con la ciénaga de Zapatosa, el complejo de agua dulce más grande del país.
Precisamente fomentar el turismo en los municipios aledaños a la ciénaga de Zapatosa, principalmente en Chimichagua, es uno de los objetivos principales de un proyecto eco-turístico que organiza la administración departamental.
La meta es atraer inversionistas interesados en establecer infraestructura hotelera en la zona. 'Este destino quiere ser explotado, teniendo en cuenta que se tiene un recurso turístico que no hemos desarrollado como lo es la ciénaga de Zapatosa, que la tenemos en reserva; es una oportunidad para generar empleo, desarrollo económico y turismo. Contamos con el muelle de Chimichagua, que es un atractivo para foráneos, pero contamos con un potencial más grande que debemos buscar la manera cómo desarrollarlo mejor', indicó el gobierno seccional.
