El desalojo de cinco apartamentos del programa de casas gratis en la urbanización Hernando Marín, en el sur de Valledupar, al no estar ocupados por los beneficiarios, sino por terceros en calidad de arrendatarios, es un campanazo de alerta frente al seguimiento que viene haciendo el Ministerio de Vivienda y las autoridades sobre el uso inadecuado que se estarían dando a los mismos en esta capital.
Así lo manifestó el gerente de Fonvisocial, Aníbal Quiroz, al precisar que en estos momentos se encuentran en estudio 900 casos más, en los cuales las familias que resultaron beneficiadas con el programa no están habitando los inmuebles, y sobre otros que estarían siendo utilizados para la venta de estupefacientes.
'Hay 900 casos que hoy están siendo investigados y documentados, pero con todo el tema del debido proceso y los procedimientos a que tienen las personas derecho para refutar el incumplimiento, solo este año pudimos hacer el desalojo en octubre, es decir, 10 meses, lo que demoran las investigaciones para poder proceder en el desalojo como el que se hizo en Nando Marín', indicó el funcionario.
El pasado lunes, con el acompañamiento del Escuadrón Móvil Antidisturbios de la Policía, funcionarios del Ministerio y Fonvisocial desalojaron los cinco apartamentos en medio de un ambiente tenso. Los inmuebles en las torres de ‘Nando Marín’ fueron entregados tras un proceso de reubicación de hogares vulnerables que se encontraban en la margen derecha del río Gutapurí. Sin embargo, algunos de estos fueron arrendados a terceros, generando un provecho por parte de quienes tienen su titularidad.
Según Quiroz, el hecho de entregar los inmuebles en arriendo es un incumplimiento de los requisitos del ministerio para mantenerse en los mismos, por lo que indicó que tras el desalojo, estos serán reasignados entre la lista de elegibles que tiene el Departamento de Prosperidad Social.