La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla) archivó las solicitudes de licencia ambiental de los proyectos piloto de fracturamiento hidráulico en yacimientos no convencionales, conocido como fracking, en los proyectos Ape Piranga y Ape Plata localizados en el Magdalena Medio.
Las licencias, solicitadas por la empresa ConocoPhillips, corresponden a los bloques VMM2 y VMM3, con incidencia en los municipios de San Martín, Aguachica, Río de Oro y Gamarra, en el Cesar, y Puerto Wilches, en Santander.
Esta técnica de fracturación hidráulica en yacimientos no convencionales es iniciativa de la empresa ConocoPhillips y tiene todavía la opción de apelación. El argumento de la Anla para este freno es que lo aportado para sustentar el piloto 'es insuficiente para realizar una evaluación adecuada, en aspectos tales como manejo y disposición de las aguas de producción y flujos de retorno, evaluación ambiental y plan de contingencia'.
La entidad consideró que para tomar una decisión sobre fracking 'es muy importante tener un panorama más amplio sobre el adecuado manejo ambiental que se dé durante la realización de esta actividad, de manera que se garantice un adecuado uso de los recursos sin afectaciones al medio ambiente'.
Para esa decisión, ya la Anla le había consultado a la Corporación Autónoma Regional del Cesar, Corpocesar, sobre el tema, y esta respondió en su momento que 'debido a que la autoridad regional carece de certeza científica relacionada con el manejo y disposición final de las sustancias de interés, debemos actuar conforme al principio de precaución y manifestamos nuestro pronunciamiento negativo para realizar la actividad'.
Vale decir que esto no implica que de momento las licencias ambientales fueron negadas y que significa de un tajo que el fracking no será aplicado en el Magdalena Medio, por el contrario existe la posibilidad que luego de la apelación se desarchive la solicitud de ConocoPhillips.
Gobierno crea comisión
El Gobierno nacional conformó una comisión multidisciplinaria e independiente de expertos para analizar y formular recomendaciones sobre la fase exploratoria de hidrocarburos en yacimientos no convencionales.
'Se busca promover una discusión objetiva y rigurosa a nivel nacional y regional, sobre los aspectos técnicos, ambientales, sociales y económicos del tema, y así poder tomar una decisión informada sobre el futuro de estos recursos y sus implicaciones para el desarrollo del país', indicó el Gobierno.
El trabajo de este equipo de expertos se dividirá en tres fases. La primera fase consiste en la instalación de mesas de diálogo regional. La segunda, incluye una revisión del marco regulatorio técnico y ambiental existente, y la tercera comprende el análisis de la seguridad energética nacional y la contribución del sector petrolero.