Hace dos meses la Gobernación del Cesar inauguró con ‘bombos y platillos’ el patinódromo Elías Ochoa Daza en Valledupar, moderna estructura que tuvo una inversión de $8.000 millones; sin embargo, aún la obra no ha podido ser utilizada por los cerca de 350 deportistas que practican la disciplina en esta capital, debido a la demora de trámites entre la Alcaldía y la administración departamental.
El escenario pertenece al municipio, pero el departamento solicitó un permiso al gobierno local para hacer una intervención y recuperarlo. Además, solicitó que le fuera entregado en comodato para su administración, pero estos trámites llevan 13 meses y aún no se oficializa el convenio entre las partes para que el complejo pase a manos del Instituto de Desarrollo del Cesar, Idecesar.
Entre tanto, los patinadores en Valledupar han tenido que recurrir a diferentes sitios, algunos en los que exponen sus vidas, para continuar con sus prácticas deportivas, mientras que paradójicamente, el escenario de ‘lujo’ que tienen sigue sin uso. Esto ha generado inconformismo y pronunciamientos de los padres de familia de los deportistas.
'La falta de planeación y omisión de la administración municipal tiene a nuestros niños y jóvenes patinadores practicando en condiciones adversas y de riesgo físico y seguridad, mientras que existe un patinódromo inaugurado hace casi dos meses allí esperando por los chicos', indicó el papá de uno de los deportistas, que prefirió no revelar su identidad.
El malestar de los padres de los deportistas de los clubes de patinaje en Valledupar radica en que la Gobernación del Cesar y la Alcaldía no realizaron el convenio para que la administración departamental pudiera tener formalmente el patinódromo. Así podría cederlo a Idecesar para que lo administre y los patinadores no tendrían que seguir esperando más tiempo para entrenar como lo exige este deporte.
'En agosto de 2017 se hizo una intervención al patinódromo municipal con recursos de la administración departamental, pero para poder hacerla debió haber existido un convenio entre la Alcaldía y la Gobernación, convenio este que no se hizo. Tuvieron 12 meses de obra que finalizó el 10 de agosto (2018), otro mes más cuando fue inaugurada, es decir que tuvieron 13 meses para hacer estos actos administrativos. Los están haciendo ahora y nuestros deportistas llevan 15 meses sin poder practicar en un escenario adecuado', sostuvo uno de los padres de los deportistas afectados.
Gustavo Galvis, presidente de la Liga de Patinaje en el Cesar manifestó que en el departamento hay 14 clubes legalmente constituidos, de los cuales ocho están en Valledupar, más nueve escuelas de formación, esto sumaría 350 deportistas aproximadamente en esta capital que están entrenando en bodegas, parques y calles de distintos sectores de la ciudad.
'Con la Liga estamos entrenando en una bodega que nos facilitó Coolesar por Los Mayales, otros grupos están en el parqueadero del coliseo, algunos en el parque en el barrio Los Cortijos. Más que todo entrenan en parques, pero la categoría mayores está practicando en una bodega, lo que no nos ha permitido tener el estado técnico y físico', indicó Galvis.
Sobre el patinódromo dijo que 'ya se realizó el comodato con la Gobernación la semana pasada, estamos esperando los tramites que son de ley para que el escenario se lo adjudiquen a Idecesar y ellos presenten la documentación necesaria para hacer entrega del patinódromo como tal'.
Entre tanto, el Alcalde de Valledupar, Augusto Ramírez Uhía, en entrevista con la W Radio dijo que el patinódromo estaba listo, pero no se podía usar.
La demora en abrir las puertas al público de debe a que la Gobernación del Cesar, además de pedir el permiso de intervención a la Alcaldía, solicitó la administración del lugar y según Augusto Ramírez, eso atrasó el comodato que cede el patinódromo al departamento por los próximos cinco años.
'El gobernador pidió el permiso para la intervención a la Alcaldía de Valledupar, nosotros le dimos el permiso. Teníamos los trámites del comodato, el día viernes (2 de noviembre) quedó listo. Además de la intervención, el señor gobernador dijo que quería responder por la administración y todo lo que tiene que ver con el patinódromo; pero el mandatario departamental no le entregó al municipio la administración del patinódromo, sino que tuvo a bien decir que la asumía y eso fue lo que demoró el tiempo', sostuvo el alcalde Ramírez Uhía.
Yeni Alcocer Plaza, secretaria de Recreación y Deportes del Cesar, se refirió al respecto y explicó que 'faltaba un trámite que tenía que hacer el Municipio con el Departamento, que hasta el pasado 2 de noviembre fue que se logró y posteriormente la Gobernación lo hará con Idecesar. Ya se están definiendo esos temas y hay que adquirir una póliza de responsabilidad civil, para que la otra semana el patinódromo quede a disposición de las comunidades'.
Mientras tanto, los cerca de 350 niños, niñas y jóvenes patinadores de Valledupar, seguirán entrenando en bodegas, parques y calles, hasta el próximo miércoles, cuando supuestamente se abran las puertas del patinódromo Elías Ochoa Daza.
'Ya se estableció el reglamento de uso, estamos esperando reunirnos con los presidentes de los clubes el martes y darles a conocer esta documentación, para que el miércoles, las escuelas y clubes ya puedan entrenar en el patinódromo', sostuvo el presidente de la liga de patinaje del Cesar.
Los males del patinódromo
En octubre pasado estaba previsto realizar en Valledupar el Torneo Nacional Interligas de Patinaje, el cual fue anunciado por el gobernador Francisco Ovalle Angarita, quien dijo además, que el evento al que asistirían alrededor de 400 deportistas del país, sería propicio para la inauguración del patinódromo Elías Ochoa Daza.
Dicho evento no se desarrolló, al parecer por falta de recursos del gobierno departamental; sin embargo, el 13 de septiembre de este año, el gobernador Ovalle sostuvo a los medios de comunicación que se iba a 'hacer una bolsa común con la Alcaldía de Valledupar, la Gobernación y que la empresa privada también se vincule en este importante evento que sería la oportunidad para mostrar este escenario y traer esa gran competencia que es el interligas nacionales'.
Entre la Gobernación del Cesar y la Federación Colombiana de Patinaje (Fedepatín) no hubo un acuerdo para firmar el convenio que se debía cerar el 13 de agosto anterior. El problema se habría presentado por falta de recursos del departamento en ese entonces, puesto que la Federación exige tener los acuerdos firmados 60 días antes de la competencia y por eso el certamen no se llevó acabo.
Debido a esta situación, el escenario estuvo en riesgo de ser sancionado para no realizar eventos nacionales por varios años, pero Fedepatin optó por no proceder con la sanción, según explicó Yeni Alcocer Plaza, secretaria de Recreación y Deportes del Cesar.
Otra denuncia que sobre el patinódromo, tiene que ver con la pista de ruta, la cual debía ser de 400 metros. Sin embargo, en el acta de recibido del contrato de obra No 2017–02–0934, la pista ruta tiene 300 metros lineales y seis metros de ancho y la pista de velocidad quedó con 200 metros lineales y 6,5 metros de ancho.
Federico Martínez Daza, secretario de infraestructura de la Gobernación, explicó que la pista de ruta 'está en casi 320 metros que puede ser homologada en alguna competencia, cuando Fedepatín vaya hacer el torneo y la pista de velocidad que es de 200 metros, cumple con la longitud para competencias. Tenemos un certificado de la Federación donde dice que estamos cumpliendo con la normatividad'.
Al respecto, Gustavo Galvis, presidente de la Liga de Patinaje, señaló que debido a estas especificaciones en las pistas, el patinódromo no puede ser usado para eventos internacionales.
'Para campeonatos mundiales no está habilitada, pero para campeonatos nacionales, como de menores, transición y mayores si se puede usar', sostuvo el dirigente deportivo.