Más de 700 trabajadores, entre médicos, enfermeras, auxiliares, y otros, regresaron este viernes a sus cargos en el hospital Rosario Pumarejo de López, en Valledupar, dando fin a un cese de actividades de 45 días, luego que en una reunión con la Junta Directiva del centro asistencial y representantes de los empleados se verificara el cumplimiento de los primeros compromisos para ir saldando la deuda de hasta 11 meses de salarios, que originó el paro laboral.
Como un primer avance se verificó el giro por más de $1.150 millones para el pago de deudas atrasadas, y la vinculación de 19 trabajadores que habían quedado por fuera de la contratación, los delegados del cese de actividades anunciaron el levantamiento de la protesta general, y de la huelga de hambre que mantenían algunos, retornando a sus actividades normales.
Julio Julio Peralta, ginecólogo, vocero de los trabajadores, señaló que 'ya se le dio apertura a los servicios que estaban cerrados, tanto consulta externa como cirugías programadas; el hospital está atendiendo al 100% en sus capacidades. Sin embargo, nosotros quedamos en asamblea permanente sin causar afectación en la prestación del servicio, vamos a estar vigilante que se vaya cumpliendo paulatinamente todo lo pactado y eso nos va a permitir ser veedores, pero ante cualquier incumplimiento reactivamos la medida'.
Por su parte, el gobernador encargado del Cesar, Wilson Solano, se comprometió a seguir apoyando al hospital para superar la crisis que enfrenta, indicando que 'tenemos listos más de $3.236 millones, a la espera de que se resuelva una tutela que garantice que estos recursos serán destinados al pago de salarios atrasados; igualmente, el próximo martes realizaremos una jornada con las EPS, con las que revisaremos, una por una, la cartera pendiente con la ESE, y el establecimiento de acuerdos de pago. También seguiremos siendo garantes en la gestión de más de 15 mil millones de pesos, recursos de la Nación por Resolución 753, para el pago de pasivos laborales de estos trabajadores de la salud que tanto lo requieren'.
Sostuvo que desde el comienzo del par, la administración departamental reiteró su decisión de ayudar a resolver la difícil situación de la ESE y su personal médico – asistencial, la cual se evidenció en pagos al Hospital por más de $6.500 millones de pesos, así como el fortalecimiento en infraestructura y dotación para que la ESE pueda prestar más y mejores servicios, y la permanente gestión ante el Ministerio de Salud, Superintendencia Nacional de Salud, Procuraduría General de la Nación, Personería de Valledupar, Empresas Administradoras de Planes de Beneficios, y congresistas, para hacer un frente común que permitiera llegar a soluciones en el corto, mediano y largo plazo.
En una mesa de trabajo el pasado martes, con el acompañamiento de la Procuraduría, la gerente del Hospital, Jackeline Henríquez, indicó que tiene depuradas cuentas por 50.000 millones de pesos en deudas de las EPS con el ente asistencial, por lo que como otra conclusión, se acordó realizar una reunión este 25 de agosto para analizar esas obligaciones, pero también para que esas EPS empiecen a utilizar la red pública de salud a fin que las instituciones como el hospital tengan ingresos diferentes.
El Viceministerio de Salud se comprometió a gestionar ante el Ministerio de Hacienda la transferencia de los recursos amparados en la Resolución 753 de 2020, por medio de la cual el Gobierno Nacional ordenó la asignación directa de recursos a las Empresas Sociales del Estado, ESE, con el propósito de fortalecer su capacidad de oferta pública de servicios y garantizar la prestación de los mismos a la población afectada por la emergencia derivada del COVID-19; para que lleguen al hospital los 15.000 millones que le corresponden por este concepto.
