Tras los lamentables hechos ocurridos en el municipio de Gamarra, Cesar, donde murió calcinada Duperlys Arévalo Carrascal, funcionaria de la Registraduría local, en medio de una asonada realizada por parte de simpatizantes de un candidato a la alcaldía que minutos antes había sido destituido por el Consejo Nacional Electoral, se llevó a cabo una jornada electoral en tensa calma.