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Un relato aterrador realizó Javier Mendoza, padre de un hombre que se encuentra en delicado estado de salud en la Clínica Alta Complejidad de Valledupar, luego de ser herido de varios impactos de arma de fuego en el barrio Villa Janeth de esta capital el pasado fin de semana.

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La víctima se trata de Yeiko Mendoza Beleño, de 31 años, quien recibió cuatro disparos, dos de estos en el rostro y cabeza con exposición de masa encefálica por lo que tiene muerte cerebral, según señaló su progenitor, quien además explicó que no está de acuerdo con el hecho de que el Hospital Rosario Pumarejo de López le pidieran donar los órganos de su hijo.

“A él lo dieron por muerto porque tiene un disparo en el rostro y otro en el cráneo. Inicialmente cuando ocurrió todo fue llevado al Hospital de La Nevada, luego lo remitieron al Hospital Rosario Pumarejo de López, donde lo dejaron en una camilla durante 24 horas conectado a un respirador artificial. Debido a la exposición de masa encefálica se generó un mal olor y lo dieron por muerto, supongo, pero seguía con vida. Cuando en la Clínica de Alta Complejidad se enteran de la oportunidad de donante, de inmediato ahí sí se mueven y lo trasladan allá, pensando en sacarle los órganos.”, expresó Mendoza.

Agregó: “Yo no estoy en contra de la donación de órganos, pero tampoco deben planificarlo o hacerlo con una persona que no haya muerto aún. Yo me opuse rotundamente a la solicitud que nos hicieron de desconectarlo, porque claramente es para la donación de órganos porque se les nota un interés y no me voy a prestar para eso”.

Ante estas afirmaciones, el Hospital Rosario Pumarejo de López, se pronunció indicando que el pasado 30 de junio ingresó el paciente, remitido desde el Hospital Eduardo Arredondo Daza, con urgencia vital, mal estado general, con trauma craneoencefálico con exposición de masa encefálica por impacto de arma de fuego.

“Desde el momento de su llegada al servicio de urgencias fue atendido de manera integral y multidisciplinariamente con todos los parámetros de acuerdo a su estado y su criticidad clínica, en  el área de reanimación. Se realizó la remisión administrativa, porque necesitaba UCI y en el momento no se contaba con disponibilidad de camas. Fue trasladado el 1 de julio a Clínica de Alta Complejidad para continuar manejo clínico con estado neuro critico detectado en la entidad hospitalaria, y valorar continuidad de protocolo de posible donación de órganos”, señaló la ESE.