Con desesperanza los habitantes del corredor minero en el centro del Cesar miran la salida de Prodeco. 'La empresa se lleva la riqueza del carbón, y nos deja pobreza y contaminación, se va y nos deja solo los socavones', dijo Robert Vides, uno de los 22.000 lugareños de La Jagua de Ibirico. Según Vides la afectación no es solo para los 7 mil trabajadores directos e indirectos de la compañía, sino para toda la comunidad que en su mayoría depende de los dividendos que dejan los ‘mineros’, como coloquialmente llaman en la región a los trabajadores de las minas. 'Aquí no hay empleo formal, gran parte de la gente vive del comercio y del rebusque, los que genera esta actividad', sostuvo. 'Nosotros quedamos con el impacto ambiental, la compañía se va y no repara nada; aquí con la parálisis de las minas, ya ha empezado a sentirse el descalabro económico en el pueblo, porque los ‘mineros’ aportaban bastante con sus compras, ahora ya no se ve tanto movimiento, y con el retiro de Prodeco será peor', subrayó. Aunque La Jagua de Ibirico y los demás municipios del corredor minero como El Paso y Becerril, han recibido miles de millones en regalías, los recursos no se ven reflejados en el bienestar de las comunidades que siguen padeciendo por falta de agua potable y condiciones dignas. Muchas administraciones municipales dilapidaron estos recursos en maniobras de corrupción. En medio del impacto ambiental que han dejado las minas y los efectos nocivos en la salud de la gente, los habitantes presagian que el retiro de la compañía terminará ocasionando una catástrofe socio-económica en la zona. Restaurantes, lavanderías, billares, estaderos, arriendos, transportadores, tiendas, supermercados, todos obtienen sus ingresos de lo que dejan los empleados de las minas. 'Aquí casi el 80% vive del comercio, y al irse la empresa, también nos tocará cerrar', precisó Vides. El Grupo Prodeco opera las minas Calenturitas y La Jagua, las cuales paralizaron operaciones en marzo del 2020, cuando comenzó la pandemia. 'Teníamos la esperanza de que pudiera reactivarse la minería, pero en cambio nos encontramos con que la compañía se retira de Colombia, eso agudizará más nuestra situación', señaló José Amín, propietario de un billar.