Este martes, un enfrentamiento entre tropas del Ejército Nacional y miembros del Ejército de Liberación Nacional (ELN) en la vereda La Llana, en el municipio de Teorama, Norte de Santander, resultó en la muerte de un soldado y dejó a otros cinco heridos tras caer en un campo minado. El incidente ocurrió mientras las tropas realizaban labores de registro y control en la región del Catatumbo, zona donde el ELN mantiene una presencia activa.
El choque armado comenzó alrededor de las 5 de la mañana, cuando las tropas se encontraron con miembros del Frente de Guerra Nororiental del ELN, una facción que opera en áreas fronterizas entre Colombia y Venezuela.
Durante la operación militar, la tropa se desplazó por un área minada, lo que desencadenó la activación de explosivos por parte del grupo insurgente, bajo el mando de alias Duván, según informó el Ejército.
La institución denunció públicamente el ataque a través de su cuenta oficial en la red social X, señalando que los hechos violan tanto los derechos humanos como el derecho internacional humanitario
Por su parte, las autoridades locales, en coordinación con las fuerzas militares, trabajan en la evacuación de los soldados heridos, quienes serán trasladados a la ciudad de Cúcuta para recibir atención médica especializada.
Suspensión de los diálogos
Este incidente se produce en un contexto de aumento de las acciones violentas por parte del ELN tras la reciente suspensión de los diálogos de paz entre el Gobierno Nacional y el grupo guerrillero.
La decisión de interrumpir las negociaciones fue tomada por el presidente Gustavo Petro, quien ordenó retirar a los representantes del Gobierno de la mesa de diálogo. Desde entonces, los ataques en diferentes regiones del país, como Arauca y Chocó, se han intensificado.
El Ministerio de Defensa emitió una condena firme tras los hechos, instruyendo a las Fuerzas Militares a intensificar las operaciones ofensivas contra el ELN.
A través de sus redes sociales, la entidad expresó su compromiso de perseguir a los responsables de este ataque y llevarlos ante la justicia, calificando el acto como una flagrante violación de los derechos humanos y del derecho internacional humanitario.
En respuesta a la escalada de violencia, las Fuerzas Armadas han reforzado la alerta en las unidades tanto fijas como móviles, con más de 226 mil efectivos del Ejército, la Fuerza Aérea y la Armada Nacional preparados para responder ante las situaciones de orden público en diferentes regiones del país.
Cabe mencionar también que la región del Catatumbo, donde se presentó este enfrentamiento, ha sido un escenario recurrente de confrontaciones armadas debido a la presencia de grupos insurgentes y otras organizaciones criminales que operan en la zona.
