Considerado uno de los más sanguinarios cabecillas de las disidencias de las Farc en el departamento del Cauca, alias Vapor fue abatido en medio de una operación militar ocurrida el pasado 14 de noviembre al sur del departamento.
Le recomendamos: Programan audiencia de pérdida de investidura contra el senador Iván Name
Tras varios días de investigación, fue un equipo especial de forenses de Medicinal Legal el que, de la mano con el testimonio de habitantes de la zona, logró identificar el cuerpo del fallecido en el momento en que un vehículo de alta gama explotó en el corregimiento de La Mesa, Cauca.
‘Vapor’ obligó a que los habitantes del Cauca estuvieran carnetizados para “tener control del territorio” y, según revelaron las autoridades, este cabecilla ordenaba asesinar campesinos que no se unieran al negocio del narcotráfico.
Según la información explicada por las autoridades, el cuerpo “corresponde a un hombre conocido como alias Vapor, integrante de las disidencias de Iván Mordisco en el Cauca y encargado de las finanzas ilegales obtenidas del narcotráfico, la extorsión y la minería ilegal, entre otros”.
“Estaría encargado de las finanzas ilegales derivadas de acciones criminales como el narcotráfico, la extorsión, la minería ilegal, entre otros. Así mismo tendría gran influencia en el manejo y control de la entrada de los insumos químicos para el procesamiento de pasta base de coca y las rutas para la salida de la droga hacia aguas del Pacífico, para luego ser enviada a Centro y Norteamérica, y cambiarlas por armas, municiones y explosivos”, señala un informe de inteligencia de la fuerza pública.
Además se conoció que alias Vapor era uno de los hombres de confianza de alias El Mocho, máximo cabecilla del Bloque Occidental Jacobo Arenas de las disidencias del departamento de Cauca, Nariño y Valle del Cauca.
Le sugerimos leer: Petro propuso formalmente ante los países del G20 un diálogo entre Rusia y Ucrania
“Este sujeto sería la mano derecha de alias El Mocho, ya que le manejaría altas sumas de dinero que oscilarían entre los 6 mil y 8 mil millones de pesos mensuales. De ahí, una de las razones para tener una camioneta de alta gama cuyo precio es superior a los 300 millones de pesos. Esta clase de automotores no son comunes en esta región del Cauca, de hecho, en algunos casos son robados”, explica alto oficial del Ejército.