Hay conmoción en la vereda Rancho Quemado, ubicada en el municipio de Segovia, en Antioquia. Un niño de solo 10 años murió luego de una descarga eléctrica al caer un rayo, durante una fuerte tormenta.
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Según el primer reporte de las autoridades, el niño se encontraba bañándose, cuando fue alcanzado por un rayo, lo que le provocó quemaduras de tercer grado, dejándolo inconsciente de manera inmediata.
Sus familiares lo trasladaron al hospital San Juan de Dios de Segovia y debido a la complejidad de las lesiones fue remitido a un centro hospitalario en Medellín. A pesar de los esfuerzos del personal médico, el murió antes de llegar al centro de salud en la capital antioqueña.
Las autoridades locales han empezado una investigación para determinar las cusas del accidente y descartar posibilidad de negligencia.
La Alcaldía de Segovia emitió un comunicado oficial desmintiendo versiones que circularon inicialmente sobre una posible lesión por pólvora asegurando que la valoración médica confirmó la muerte del menor por descarga eléctrica.
Las autoridades antioqueñas han difundido en varias ocasiones recomendaciones a poner en práctica cuando se presenten tormentas eléctricas, situaciones que suelen afectar a los pobladores de zonas rurales.
Una de las recomendaciones es evitar estar al aire libre durante una tormenta eléctrica, así como buscar refugio en estructuras cerradas con conexiones en tierra y alejarse de objetos metálicos y árboles altos.