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Victoria Eugenia Dávila Hoyos alza sus manos frente a la cámara y clava su mirada en el periodista que la interroga. Asegura que sus palmas están limpias, que no tienen rastro de sangre y no hay gota alguna de corrupción. Ese es su mantra. Vicky, a secas, arrancó su campaña presidencial de cara al 2026. Quiere –por ahora– llegar a la Casa de Nariño sin el apoyo de maquinarias ni de élites tradicionales y cuestionadas; sin embargo, reconoce que el camino es largo y, en algún momento, deberá buscar alianzas. La condición, según ella, es que sea gente transparente.

¿Precandidata o candidata presidencial?

Yo lo que soy es una ciudadana que un día empezó a sentir la misma angustia que estamos sintiendo millones de colombianos. Yo tenía un gran trabajo, tenía un buen salario, tenía una seguridad laboral, un futuro para mi familia y yo un día empecé a pensar: ¿qué más hago? Sigo como periodista como lo he hecho estos 33 años denunciando a los corruptos, a los mafiosos, enfrentándome al crimen o ¿qué más puedo hacer? Hay un país lleno de impunidad. Y de pronto un día me miré al espejo y tomé con determinación la decisión de irme a la calle, de dejar mi sitio de privilegio de alguna manera, mi sitio de protección en la sociedad y venir a la calle a tratar de aglutinar, de reunir a millones de colombianos que estamos pensando lo mismo, que queremos que este país eche para adelante.

¿Cuál es la prioridad para usted?

Que el país no se nos hunda, que no perdamos el país. Que podamos transformar a Colombia en un país floreciente. Esa es la prioridad. Lucha transversal contra la corrupción. Entonces esa lucha transversal va a mejorar automáticamente, va a tener mejoras en la economía y en la seguridad. Pero entonces vienen dos pilares, uno es la seguridad.

Estamos en manos de los criminales. La Defensoría del Pueblo está diciendo que más del 74 % del país está ya con presencia de los grupos criminales. Tenemos que enfrentar el crimen con determinación, tenemos que entender que a los criminales hay que combatirlos, no podemos volvernos amigos de los criminales, no podemos ser sus cómplices, no somos sus aliados.

Ahora bien, ¿qué hay que hacer? El 7 de agosto del 26 hay que acabar con todos los procesos de paz que han salido de esta paz total que fracasó, que tiene todo ese componente del lateral donde solamente cumplió la fuerza pública. Ahora bien, la economía, la economía es otro pilar fundamental porque la gente en su casa lo que necesita es poder tener más dinero en el bolsillo. Esa es la verdad, necesita poder tener plata para comprar su mercado, todo se volvió más caro, necesita poder tener oportunidad de mandar a sus hijos al colegio, de que sus hijos tengan una oportunidad de ir a la universidad, de tener un crédito, facilidad de un crédito para un emprendimiento, de conseguir trabajo, de lograr y poder cumplir el sueño de tener una casa. Eso es lo que necesita la gente de a pie.

¿En cuál orilla política se ubica?

Hoy yo no estoy preocupada por enmarcarme en ninguna casilla, encasillarme en un sitio ideológico. Porque los problemas del país van más allá de la ideología. Este gobierno lo que ha hecho es encasillar al país en una ideología. Son de izquierda, son de un proyecto político destructivo para Colombia, lo demás no vale, lo demás no importa, no escuchan, destruyen todo a su paso, hay corrupción, hay porquería, hay dejadez, hay ineficiencia, hay una incapacidad enorme de ejecución, de entender el país y de entender lo que necesitan los colombianos. Entonces, no quiero enmarcarme en un lado o en otro. Mire, a mí me gusta mucho usted qué ve aquí. ¿Qué ven estas manos? Las manos limpias. Y ese es mi mayor capital.

Fuimos testigos de ese abrazo con el expresidente Álvaro Uribe en Barranquilla el año pasado… Usted necesita respaldo político para llegar a la Presidencia, ¿le gustaría recibir el apoyo del Centro Democrático?

Voy a ir por firmas, no estoy buscando el aval de ningún partido. En el caso específico del Centro Democrático no me han ofrecido nada, no he pedido nada. Ellos están en su proyecto, están buscando un candidato como están los otros partidos y yo estoy en mi proyecto ciudadano.

Yo hoy necesito que este proyecto para transformar a Colombia, para encauzarlo por el florecimiento y la prosperidad que vaya creciendo entre los ciudadanos, entre la gente que tiene esta preocupación sin las maquinarias, sin la politiquería. Cuando la gente votó por Petro mayoritariamente o cuando él gana las elecciones, gana porque ya la gente estaba inconforme con el resultado que tenían de país en ese momento sin importar quién lo había hecho bien o quién lo había hecho mal. Confiaron en este gobierno y ha sido un fiasco. Hoy sigo creciendo entre los ciudadanos. Mañana toda la gente buena, sin tacha, decente, con rectitud, que quiera ser parte de este proyecto llegará en su debido momento sin ningún pacto conmigo. Yo no voy a pactar nada, yo no voy a transar con nadie, yo no voy a hacer lo que durante 33 años critiqué.

¿De quién se rodeará usted en caso de llegar a ser presidenta?

El primer propósito es apretarle el cinturón al Estado. Nosotros tenemos que convertir el Estado en un Estado eficaz, pero mucho más pequeño y austero. Segundo, necesitamos acabar con el despilfarro, la plata tuya, la de ellos, la de él, la de ella y la mía. Eso es lo primero. Segundo, hay que bajar los impuestos. ¿Qué tiene que ser el presidente o la presidente que llegue allá? Pues tiene que ser una persona que sepa dirigir, una persona que trabaje con rectitud, que sea 24/7, que no tenga tanta agenda ni tome tanto café de ese que dan en la Casa de Nariño que parece muy tóxico, y que esté dedicada al país. El mayor honor que puede tener un colombiano es ser presidente de la República. Ese es el mayor honor y uno no puede creer que llega a un reinado.

No es el rey, no es la reina. Uno llega a ser el primer empleado de la nación, ¿de quién? De los colombianos que confiaron en uno. Entonces, los técnicos son fundamentales, hay que ubicar en cada sector a los mejores, hay que ubicar en cada sector a los que más saben y a los que más decentes son. Porque no puede ser que sigamos con un estado infestado de porquería.

Usted es muy criticada por los hechos irregulares en los que han estado inmersos miembros de la familia de su esposo, ¿tiene algo para decir?

Lo único que le puedo decir es que yo puedo responder por el esposo que tengo, que es Gnecco. Yo creo que entre los Gnecco hay gente muy buena, algunos que han tenido problemas y así los hay en los Petro, en los Santos, en los Samper, gente muy buena, la mayoría gente buena. Hay otros que han cruzado esa cerca y quien haya cruzado la cerca del delito tiene que pagar, no importa quién sea.

Yo no tengo compromisos políticos con nadie. Tampoco los tengo con algunos Gnecco que hacen política, más bien los Gnecco que hacen política están aliados es a Petro, esa es una realidad, votan con Petro en el Congreso y pues son aliados políticos después de que Petro tanto los criticaba.