En un estremecedor caso de violencia de género ocurrido en el sur de Bogotá, Yésica Paola Chávez, una joven de 26 años, fue asesinada a tiros mientras trabajaba en una peluquería. El responsable del crimen fue identificado como el subteniente Andrés Julián Mesa Ramírez, miembro activo de la Policía Nacional y expareja sentimental de la víctima.
Según el dictamen de Medicina Legal, la mujer recibió 10 impactos de bala de una pistola nueve milímetros, arma de dotación del uniformado. Los informes señalan que el atacante ingresó al establecimiento sin mediar palabra, sacó su arma y disparó repetidamente contra Yésica, quien falleció casi instantáneamente en el lugar.
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Las cámaras de seguridad de la peluquería captaron la totalidad del crimen, convirtiéndose en evidencia clave para la investigación. Las imágenes, muestran además cómo, tras asesinar a su expareja, Mesa Ramírez se disparó en la cabeza, quitándose la vida.
Un elemento que ha llamado la atención de las autoridades es la presencia de otro policía uniformado en la escena. El video muestra a este agente llegando al establecimiento y observando sin intervenir mientras su compañero se suicidaba. Según testimonios recogidos por la Fiscalía, dos policías de una patrulla motorizada se encontraban fuera del local durante el ataque, lo que ha generado una investigación paralela para determinar si hubo omisión de socorro.
La Fiscalía continúa con las investigaciones y ya ha realizado los actos urgentes que incluyen la recolección de testimonios y análisis de videos de seguridad.
Además, se conoció que la víctima había denunciado en dos ocasiones previas actos de violencia por parte de su expareja durante los dos años de relación sentimental.
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Frente al hecho, el teniente coronel John Fernando Díaz manifestó: “Repudiamos cualquier acción que atente contra la vida y la integridad de nuestras mujeres”.
