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En desarrollo de operativos policiales, la Policía Nacional logró la captura de Wilmar Alberto Sánchez Ortega, alias Jerónimo o 300, cabecilla de la subestructura ‘Jorge Iván Arboleda Garcés’ del Clan del Golfo en el municipio de Zipaquirá, Cundinamarca.

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Jerónimo’ tenía una trayectoria criminal de más de diez años y es señalado por las autoridades como el encargado de dinamizar extorsiones, tráfico de armas de fuego y desplazamiento forzado en el nordeste antioqueño, especialmente en Amalfi.

De acuerdo a lo que dio a conocer el brigadier general Carlos Fernando Triana Beltrán, director nacional de la Policía, el detenido, requerido por el delito de concierto para delinquir agravado, era hombre de confianza de alias Chuzo, máximo cabecilla de esa subestructura y determinador de acciones terroristas contra la fuerza pública y la población civil.

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“Con este resultado se afectó la línea de mando de esta organización criminal, impidiendo la expansión sobre el territorio y las confrontaciones con otros grupos armados ilegales en Antioquia”, declaró el director de la institución.

Esta captura se suma a otros golpes que han sufrido los grupos al margen de la ley como la de Yoveimar Grueso, alias Diomedes, y José Tayson Perlaza, alias Quinta, cabecillas del frente José María Becerra del ELN, en Mercaderes, Cauca.

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‘Diomedes’, con 12 años de trayectoria criminal, era responsable de acciones terroristas contra la Fuerza Pública y la población civil, control de corredores de movilidad y reclutamiento de menores en Nariño, Cauca y Valle del Cauca. Por su parte, ‘Quinta’, con 10 años de actividad criminal, lideraba comisiones armadas y acciones ofensivas contra la Fuerza Pública.

Ambos capturados son requeridos por homicidio agravado y rebelión. “Este contundente resultado afecta la línea de mando del ELN y mitiga el reclutamiento de menores y las acciones violentas en la región”, señaló el ministro de Defensa, general (r) Pedro Sánchez.