Mediante el intercambio de información entre la Policía Nacional y sus similares de Bélgica y Holanda, así como con el Departamento Antidrogas de los Estados Unidos (DEA), lograron la incautación de 7.5 toneladas de cocaína colombiana en Holanda, al igual que la captura del empresario local que importó los estupefacientes.
Así lo confirmó el director de la Policía Nacional, general Jorge Hernando Nieto, quien explicó que la primera incautación de cuatro toneladas se dio en una bodega de Osterhout (Holanda), las cuales habrían sido importadas por el empresario europeo Paulus Adrian Van, quien fue capturado durante otra operación, realizada horas antes, cuando se logró la incautación de 3,5 toneladas en Amberes, Bélgica.
A principios de 2015 las autoridades de policía holandesas, alertadas por la DEA, comenzaron las investigaciones para detectar el origen de la fortuna del empresario, quien en enero de este año efectuó las primeras importaciones de banano procedentes del puerto de Turbo (Antioquia). En un comienzo, las inspecciones no arrojaron la presencia de drogas ilícitas.
'Dentro del proceso investigativo, y con el ánimo de recopilar elementos de prueba, un equipo de la Policía Nacional de Colombia se desplazó a Panamá, donde representantes de la empresa Wanrroy se reunían periódicamente para planear los envíos de droga hacia Europa, gracias a una alianza con integrantes del ‘Clan del Golfo’. Justamente en mayo pasado, dos miembros de esa firma europea sostuvieron un encuentro con dos personas procedentes de Colombia con ese propósito', dijo el general Nieto.
El oficial explicó que los investigadores lograron determinar que los contactos entre las organizaciones se establecían por medio de redes sociales, haciendo uso de palabras clave para concretar los envíos como, por ejemplo: 'I need some white bananas. when you send them to me?' (Necesito algunos bananos blancos. ¿Cuándo me los envías?).
Gracias a esas alertas de la Policía Nacional, se puso en marcha la ‘Operación Van Der’, con la participación de la Fiscalía General de la Nación, la DEA y las policías de Holanda y Bélgica, para lograr la incautación del alcaloide y la desarticulación de la estructura transnacional dedicada al tráfico de sustancias ilícitas.
La segunda incautación de cuatro toneladas de narcóticos, efectuada este jueves 30 de agosto, permitió la captura de ocho personas más: dos holandeses, un ruso, dos ciudadanos de la República de Armenia y tres más de Bélgica.
'Hemos culminado con éxito la primera fase de la investigación que permitió desarticular la red internacional dedicada al tráfico de cocaína hacia Europa. Seguiremos avanzando para determinar con precisión los nexos con cabecillas del ‘Clan del Golfo’, grupo armado organizado que estaría tratando de enviar droga desde las terminales marítimas del país', afirmó el director de la Policía Antinarcóticos, general Fabián Laurence Cárdenas Leonel.