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Antes de la llegada del virus covid-19 existía la emoción de vivir en vivo y en directo desde las tribunas del estadio un partido de la Copa América. Sin embargo, todo cambió cuando llegó la pandemia y desde entonces pocos partidos de fútbol se han disputado con público en Latinoamérica.

Tras darse a conocer la noticia, en febrero, que posiblemente el evento tendría público en Colombia y Argentina, Juliana Calderón y sus hijos decidieron armar su itinerario para asistir.

Pero luego de que los dos países iniciales desistieran de hacer la Copa América tras una tercera ola del covid-19 se decidió realizarla en Brasil, por lo que la familia colombiana cambió sus tiquetes y volaron hacia territorio brasileño.

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No fue hasta el primer partido de la Selección, disputado este domingo, que Juliana y sus hijos se enteraron de que no estaba autorizada la entrada de hinchas a los estadios.

La mujer comentó a las afueras del recinto que 'Inicialmente teníamos programado ir a la Copa América en Colombia y Argentina, compramos boletos para Buenos Aires, decidimos posponerlo para Brasil, y aquí estamos esperando la Selección, Colombia tuvo una audiencia con el 30% de la población del estadio (contra Argentina, por la eliminatoria), así que imaginamos que aquí sería lo mismo'.

Aunque no pudieron ingresar para ver ganar a la Selección, la familia decidió no perder ese momento y esperaron la salida del bus para saludar a los jugadores.

Juliana y sus hijos compraron pasajes para viajar a las ciudades donde jugará Colombia en el Grupo A, es decir: Cuiabá, Goiânia y Río de Janeiro.