Cinco cuerpos fueron hallados este jueves cerca de una zona donde ocurrió, hace dos días, un mortífero ataque contra indígenas en el suroeste de Colombia, informaron autoridades.
'Rechazamos el vil asesinato de 5 personas en Corinto, Cauca', escribió en Twitter el ministro de Defensa, Guillermo Botero, quien señaló como autores del crimen a 'narcotraficantes'.
Cuatro de los fallecidos 'al parecer adelantaban labores de topografía', indicaron las Fuerzas Militares en un comunicado.
Sus cuerpos fueron hallados en la vereda Santa Helena y otro en el cercano corregimiento de Guatano.
De momento no se ha dado a conocer la identidad de los fallecidos ni el momento de su muerte.
'Por las características de los que están en Santa Helena no se identifican inmediatamente como indígenas', dijo a Noticias Caracol Jaime Asprilla, secretario de gobierno del convulso departamento del Cauca.
El presidente Iván Duque ordenó a la cúpula militar desplazarse al lugar de los hechos.
Sin referirse directamente al homicidio de este jueves, expresó su preocupación por el accionar de las disidencias que buscan 'doblegar a las comunidades' locales con acciones 'sanguinarias'.
El municipio de Corinto se encuentra a aproximadamente una hora del cabildo indígena de Tacueyó, donde el martes fueron asesinados cuatro guardias y una autoridad nativa, presuntamente por guerrilleros disidentes de las FARC que no se acogieron al pacto de paz firmado en 2016.
Duque viajó al Cauca miércoles y dispuso el despliegue de 2.500 militares de élite en la región en un plazo de cuarenta días.
Tras décadas de persecución a las drogas, Colombia sigue siendo el principal productor de cocaína y Estados Unidos su mayor consumidor.
Relato de masacre en Tacueyó
Sin contemplación. Así fue el ataque perpetrado por disidencias de las Farc el pasado martes en el que fueron asesinados cinco indígenas, entre ellos Cristina Bautista (gobernadora y líder de la comunidad Nasa). Seis personas más resultaron heridas.
Del hecho, que ocurrió en el resguardo de Tacueyó, territorio del municipio de Toribío, en el departamento de Cauca, se siguen conociendo nuevos testimonios que dan cuenta de la barbarie de los autores.
Así lo dio a conocer al diario El Tiempo un miembro de la guardia indígena que resulto herido. La persona, que no se identificó, señaló que junto con la gobernadora y los otros miembros de la guardia intentaron evitar el secuestro de dos personas, y 'desde la camioneta', en la que se movilizaban los delincuentes, les dispararon y luego los persiguieron. 'Pero luego ya no solo nos perseguía una camioneta. Llegó otra que salió de la parte baja, como de los lados del río Negro. Nos seguían disparando', dijo el sobreviviente que presenta heridas de esquirlas de granada.
Agregó que en medio de las balas se bajaron de la camioneta y trataron de resguardarse 'agachados, utilizando el vehículo como un escudo'. 'Lamentablemente uno se queda con esa impotencia de ver caer a un compañero, a un amigo a cinco metros de donde uno está', dijo el testigo al diario capitalino.
Precisamente este jueves se llevó a cabo el funeral de las víctimas en el resguardo Tacueyó. Con visibles muestras de dolor familiares de los indígenas asesinados le dieron su último adiós.
Por el ataque del martes el presidente Duque ordenó el miércoles que en un término de 40 días debe iniciar operaciones en el Cauca la Fuerza de Despliegue Rápido número 4, integrada por 2.500 hombres.