Interesante artículo de Salud Hernández de porque los negros son tan marginados en Colombia. En el poder, según ella, no los quieren. Y le encamina al actual gobierno por dejarlos por fuera de toda figuración.

Llego de Miami Ernesto Giraldo, repleto de noticias de la Florida, me habla de Alfredo Mantilla y su semanario EL COLOMBIANO, que sigue siendo N 1 en el sector latino.

Me trajo ya formalmente el itinerario que tendré que cumplir en Venezuela en una mini gira con "Voces Billos Hoy". Según Ernesto, Saúl Campanela es uno de los mejores anfitriones que ha conocido. "Él y su hermano te van a tratar como un rey".

Bueno las referencias que tengo de Saúl es de que es uno de los coleccionistas de música latina más importante. Se habla de 35 mil CD.

Es curioso, durante años recorrí Venezuela y otros lugares con LOS MELODICOS de Renato Capriles. Y ahora cuando Renato esta en retiro me viene la oportunidad de conocer a fondo ese gran mundo que hay detrás de la "Billos Caracas" y con una renovación total de la agrupación. Es como revivirla en su mejor época. Saúl desea que sea testigo.

Y lo seré, porque 3 bailes los grabaré para Tv…

….

Viajaré con mucho entusiasmo. Pronto…

….

A propósito de Ernesto, vino en compañía de su prometida. Y está siendo muy bien atendido.

….

El capítulo de mis "memorias" en la web sobre Rafael Escallón Villa, quien me metió en el periódico, produjo reacción internacionalmente. Recomiendo leer una carta que me llegó de Holanda, entre otras, la cual sale publicada hoy en mi columna en el HERALDO.CO.

....

A raíz del capítulo que dediqué el viernes a Rafael Escallón Villa, tomado de mis MEMORIAS, recibí reacciones internacionales. Hoy publico una carta desde Holanda que refleja la emoción que sintió la remitente, al leer el capítulo. La publico sin quitarle punto ni coma:

Apreciado y bien recordado Edgar,

No sabes cuanta emoción me produjo leer tu columna hoy. Cuantos hermosos recuerdos trajiste a mi mente y cuanto calor trajo a mi corazón cada palabra por ti escrita haciendo relación no solo a mi compadre Rafael Escallón, sino a mis padres, a mi compadre William del Valle y a cada uno de los miembros de ese grupo selecto que fue la Pesada y de quienes orgullosamente me considero heredera.

Cuando se vive en el exilio que a veces la vida nos impone al decidir casarnos con extranjeros, estos momentos tienen un valor inigualable y gracias a ti hoy hemos vuelto a sentirnos anclados a nuestra tierra no solo yo, sino también otros herederos de la pesada a los cuales les hice llegar tu artículo, como son la hija de William del Valle (en Frisco, Texas), quien me agradeció mucho compartir el articulo ya que citando sus palabras textuales le hacían conocer mejor a ese gran hombre que fue su padrino. A mis hijos quienes crecieron jugueteando en las reuniones de la pesada, dándose el lujo de conocer a todos los personajes que pasaron por nuestra terraza y que hoy viven también lejos de su patria (New York y Quebec). A William Hernández en Miami que de niño y adolescente sol querían que llegara el sábado para para oír las historias y anécdotas de la Pesada, pero también para ir por el hielo, o el trago que acababa y así recibir los maravillosos "vueltos" de la mano de Rafael o del Tigre Fegali.

En fin de todos aquellos herederos de la pesada que hoy han vuelto a deleitarse con anécdotas de sus padres o abuelos. En nombre de todos ellos te doy las gracias por calentar nuestros corazones y alegrar nuestro espíritu con tu artículo.

Particularmente te doy las gracias por la felicidad que has dado a mi madre hoy, al saber de tus elogios, ya que ella como lo dice siempre fue una privilegiada no solo al ser la única mujer miembro de la Pesada en Cartagena, sino porque los ha acompañado a lo largo de sesenta años, pero también porque tú la escogiste en una época como cómplice para algunas de esas geniales locuras que hicieron feliz a tanta gente en Cartagena, como aquella de los matrimonios a parejas de escasos recursos. (Aun me parece estar sintiendo el olor a pudin de matrimonio en casa, porque mi mama estaba feliz haciendo algunos para poder ayudarte), o aquella vez que volvías locos a todos por llevar unos viejitos a conocer el mar.

Leyéndote Edgar no puedo evitar que vengan a mi mente anécdotas con aquellos famosos que desfilaron por mi casa cada sábado llevados de tu mano. Recuerdas cuando llevaste a Roberto Ledesma?, su única condición era que no le pidieran cantar y tú lo hiciste saber antes de su llegada. Recuerdo que agradable fue esa tarde, pero más aún la sorpresa de Ledesma al verse tratado como un amigo más y que nadie le pidiera cantar. Tanto que no pudo más y al calor de los tragos no solo arranco a cantar sino que hasta lo hizo coreado por William Del Valle.

Aun me parece verte emocionado cuando descubriste a aquella niñita llamada Shakira, que cantaba precioso y a quien visionaste como la gran artista que es hoy. O aquella ocasión en que llevaste a Palomo Linares, siendo este aun un hombre soltero, y que mi mamá no podía con la vergüenza de verme la cara de idiota que tuve toda la tarde mirándole arrobada.

Cuanta gente conocí por ti llevadas a esas reuniones donde eras el Benjamín del grupo, pero ya entonces admirado y respetado por muchos. Por mi casa desfilaron desde políticos importantes como gente de la farándula nacional, toreros, magos, cantantes de talla internacional, y hasta cubanos anticastristas, siendo mi padre un hombre con tantas amistades encuba. Contigo Edgar no había límites ni fronteras.

Hoy he reído a carcajadas recordando anécdotas de la Pesada como aquella en que el Cónsul de Venezuela en Cartagena, recién llegado, hace indagaciones para saber quiénes eran los personajes importantes de la ciudad y lógicamente llega a la Pesada. El decide presentarte y se acerca a las oficinas del Diario de la Costa donde le informan que el propietario y director se encuentra en una reunión en la gerencia del seguro social. El hombre no se rinde y camina los pocos metros que separaban el periódico del seguro y al llegar a la secretaria, le informa que el señor director está en una reunión con su jefe de suministros, su asesor jurídico, su coordinador médico y el gerente del periódico. El, aprovechando un descuido de la secretaria se asoma y en realidad atisba en la mesa de reuniones al doctor Jesús Llamas Mendoza, quien era el gerente, a Tico Urzola, quien era el coordinador médico, a William Del Valle ( jefe de bienes y servicios), a Nacarillo y a Rafel Escallón, y observa que William del Valle anotaba acuciosamente algo en una larga lista. Decide esperar ya que es viernes y como buen caribeño sabía que la jornada no sería tan larga ese día, pero en vista de la demora vuelve a burlar a la secretaria, y esta vez se introduce en la oficina para enterarse estupefacto que la famosa reunión y la extensa lista, no era más que la planificación de la viuda con carne salada que se efectuaría al día siguiente en la finca de Turbaco. Es entonces cuando decide que ese sería por siempre su grupo en Cartagena.

Recuerdas una vez al recibirme yo de bachiller en aquella fiesta apoteósica que se hizo cerrando la calle donde aún vive mi madre?, tú me preguntaste, que vas a estudiar?, al contestarte yo que medicina, Rafael con aquella voz ronca me dice: "mi querida Jaque porque no estudias algo más acorde con tu inteligencia; medicina lo estudia cualquiera y tú eres tan brillante que deberías ser Diplomática o abogada". Y Tico con aquella gracia le dice: "pero los brutos te mantenemos vivo".

En fin Edgar son tantas y tantas anécdotas que terminaría yo también escribiendo un libro, pero eso te lo dejo a ti que eres el de la pluma ágil y la mente veloz. Porque eres un periodista que si fue profeta en su tierra, solo que en la tierra ajena llegó más lejos. Mira tan lejos que yo cada día te leo desde la tierra de los tulipanes y los molinos.

Recibe mi fraternal abrazo y mi más sincera admiración.

Tot Ziens,

JACQUELINE DE LA VEGA GHISAYS

@flashedgarg