El doctor Alejandro Reyes, sin duda uno de los académicos que más sabe en Colombia del tema de tierras, sostuvo recientemente que las Farc como organización tienen razón cuando aseguran que no son multimillonarias, que el problema radica en que muchos de sus cabecillas –a título personal– se volvieron archimillonarios a través de actividades ilícitas.
El comentario de Reyes estaba relacionado con una de las noticias de la semana en Colombia: la intervención de la Fiscalía a varias cadenas de supermercados del centro del país que tenían un dueño bien particular: ‘Romaña’, uno de los más sanguinarios terroristas de las Farc en los últimos 20 años.
Es posible que las Farc como tal no sean las dueñas de dichos supermercados, pero ¿será que los miembros del Secretariado desconocían que muchos de sus subordinados se hicieron ricos con el dinero de actividades como el narcotráfico y el secuestro?
Con toda seguridad sabían, entre muchas otras cosas porque las Farc eran y siguen siendo una organización piramidal, esto es que todas las órdenes y decisiones provienen de los llamados ‘comandantes’. Cualquiera se resiste a creer que ‘Romaña’ fuera una rueda suelta en las Farc. Tan no fue así que hizo parte de las mesas en las que el grupo guerrillero y el gobierno de Santos sellaron la paz en Cuba.
Que nadie se sorprenda: ya como parte de la banda delincuencial, ya a título personal, no hay duda de que esos que dicen ser los mandamases de las Farc no tienen dónde acomodar la plata que consiguieron con la cocaína que durante años enviaron a Estados Unidos y Europa, y con los secuestros y las extorsiones. ¿O es que acaso se nos olvida que hace algún tiempo The Economist calculó la fortuna de los de ‘Timochenko’ en unos USD10.000 millones?
Pero, claro, si alguien le pregunta a Iván Márquez o a Pastor Alape qué propiedades tienen, prácticamente responden que están pasando hambre, que enfrentaron al Estado por convicción y no por dinero, y que ellos son un libro abierto que está a disposición de 50 millones de colombianos y también del mundo entero.
Entonces, ¿qué debe pasar con ‘Romaña’ luego del descubrimiento que hizo la Fiscalía sobre su no declarado patrimonio? Para mi gusto, lo de su plata mal habida es un juego de niños. A mí lo que no me deja dormir desde hace tres días es la cínica confesión que el sujeto en mención hizo respecto al abogado Enrique Márquez Díaz: que fue asesinado en cautiverio luego de ser secuestrado por las Farc.
A Márquez Díaz, retenido en Bogotá en febrero de 1999, lo hicieron célebre sus padres, don Ismael y doña Amalia, porque nunca dejaron de buscarlo y porque en todos los mensajes radiales que enviaban lo llamaban “Kike Kike del alma”. Paz en su tumba.
P.D.: Herbin Hoyos es uno de los mejores periodistas que ha tenido Colombia durante décadas. Él es el fundador del programa “Las voces del secuestro”. Adicionalmente, en los últimos tiempos hizo suya la causa de las mujeres que denunciaron haber sido violadas por guerrilleros de las Farc. Nadie quiere ver a Hoyos maltratado. No se lo merece. Hay que rodearlo.