Hay planteamientos muy parecidos a los que a continuación expongo, que no por carecer de los elementos específicos que les otorguen categoría de brillantes tesis de grado o de sólidas teorías, dejan de ofrecer las tres ventajosas opciones de “simplicidad, brevedad y claridad”, factores que evidencian la buena fe del periodista.

El fenómeno de la inflación, tema de reciclaje diario por ejemplo, que también ha pasado por el filtro de esta columna, deberá ser sometido nuevamente al decantador análisis que contenga los tres elementos aludidos en la quinta línea anterior, en un intento más por dar con el paradero de las soluciones, a partir de las medidas acertadas que deberán tener en cuenta este y los futuros gobiernos para desacelerar el proceso de la “infla” y de la “rece”:

- Reducción de los impuestos para alivio sintomático de los contribuyentes y del sector productivo.

- Reducción del gasto público para nutrir el rendimiento de las partidas presupuestales.

- Instituir controles especiales para el despilfarro y la corrupción administrativa, con el fin de hacer desaparecer el déficit fiscal. La falta de recursos –reflejo del déficit fiscal– obliga al Gobierno a dar pasos en falso.

- La emisión de moneda sin respaldo del Banco de la República con el fin de cubrir adiciones presupuestales. Y el incremento de circulante, una de las causas de la inflación.

- El aumento de los impuestos y la creación de nuevos es la tablita de salvación de todas las administraciones y el recurso disponible para que el Estado pueda saldar la deuda que adquirió con el Banco de la República.

Este último episodio se traduce en la consecuente sobrecarga de costos para el sector productivo, que se sacude enviándolo a la canasta familiar y a todo lo demás convirtiéndose virtualmente en inflación.

He aquí el cuadro y el recuadro de todos nuestros padecimientos, incluyendo el desempleo como secuela inmediata de la crisis productiva, que arranca de eso que llamamos corrupción administrativa, único y verdadero origen del déficit fiscal.

Incongruencias:

- El humorismo es un dispositivo que permite descargar las toxinas del carácter a través de la risa.

- Acerca de la lectura, pienso que quien lee mucho sabe mucho; quien lee poco, sabe poco; quien nada lee, nada sabe.

- Procura permanecer siempre alegre, sino quieres perder a tus amigos.

- Algunos seres humanos beben con la sed de otros.

- El novio o la novia en su primera noche: “Eres como un injerto de cielo en este asqueroso planeta”.

- El buen humorista nunca da motivos para que se rían de él.

- La mujer es para el hombre lo que la cadena para el perro. La diferencia está en que el perro encadenado se vuelve cada vez más feroz.

- La inmortalidad está al alcance de todos, basta con morir.

- Si una imagen vale más que mil palabras, para lo poco que queda por decir, basta con un solo idioma en el mundo.

- Los límites también existen en la amistad.

Dime qué edad tiene la mujer con la que andas y te diré qué clase de imbécil eres.

-Dentro de un lugar muy recóndito de la felicidad hay partículas que destilan sufrimiento.