Esta es una columna escrita durante semanas, porque cada vez que he considerado que algo no me cabe en la cabeza lo he ido añadiendo a la lista. Claro, que he echado mano a temas que ya he tocado en columnas pasadas, porque por más que trato no he logrado comprenderlos. Nunca toco tema político, pero no me cabe en la cabeza cómo Sergio Fajardo pensó que Claudia López podría ser presidente de Colombia en caso de que él faltara.

Fue con seguridad esta absurda escogencia una causa clave de su derrota y se salvó el país de tener de vicepresidente a una buscapleitos destemplada, y eventualmente hasta presidente. Y siguiendo con tema político, no puedo comprender por qué los medios de comunicación insisten en entrevistar siempre a los mismos congresistas, que como coincidencia son los más detestados por el grueso de la gente. Tampoco me cabe en la cabeza cómo los colombianos seguimos polarizados si ya el que ganó, ganó, y el que perdió, perdió. O, por qué se complican y extienden las negociaciones con el Eln si el Gobierno no puede darles más de lo concedido a las Farc, ni el Eln va aceptar menos de lo concedido a las Farc.

Por ejemplo, no me cabe en la cabeza, ¿por qué la Secretaría de Movilidad no ha instalado un semáforo en el cruce de la carrera 57 con calle 94, esquina donde se interrumpe el tráfico fluido de esa carrera y el de este tramo de esa calle, por una absurda cámara de velocidad? Tampoco entiendo por qué continúa funcionando la cámara para comparendos de velocidad en la calle 84 con carrera 59, ya que se supone que esta funcionaba allí por el Colegio Marymount, el cual ya fue trasladado a Sabanilla. O, ¿qué diferencia puede haber entre las carreras 51B y 52, ambas de bajada, para que en la primera haya una cámara de velocidad entre las calles 79 y 80 y en la segunda no? Parecería, o mejor dicho, es un rentable capricho más como muchos otros. ¿Por qué congestionar vías innecesariamente al prohibir cruces tan obvios como los de las calles 53 y 70 hacia la carrera 46; Av. Olaya Herrera, bajando, si pueden disminuir velocidades con reductores? ¿Por qué Barranquilla adolece de señales de tráfico indicativas de destino para orientar a propios y visitantes en el perímetro urbano y en la Circunvalación, como toda ciudad desarrollada, cuando antes sí las tenía? Por más que trato, no puedo entender cómo es que la actual ampliación de la autopista al mar que hoy se desarrolla desde Puerto Velero hacia Cartagena solo llegará hasta el arroyo de Juan de Acosta, y no hasta el cruce de dicha Vía al Mar con la llamada Vía “Río Mar” que conecta la carretera Oriental con Santa Verónica, ubicado ese cruce unos 800 metros más adelante que el puente sobre dicho arroyo.

Ahora que Colombia volvió a quedar campeón en el reciente mundial de patinaje celebrado en Holanda, no me cabe en la cabeza cómo es que ese deporte no hace parte de los Juegos Olímpicos, cuando recientemente incluyeron otros que ni los nombres de estos conocíamos. ¿Por qué sí se incluye el patinaje en las Olimpiadas de Invierno y no en las generales? ¿Qué sucedería si la potencia en patinaje fuera EE.UU. o algún país europeo? Y así la lista es interminable. A medida que recuerde otras situaciones que no me quepan en la cabeza, las iré relatando.

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