La tecnología está presente en todos los aspectos de la vida cotidiana. Los niños de hoy crecen rodeados de dispositivos que ofrecen oportunidades y riesgos. En este contexto, los padres enfrentan en la actualidad el desafío de enseñar a sus hijos a usar la tecnología de manera responsable y equilibrada.
Criar en la era digital implica establecer acuerdos y estrategias de crianza en pareja, garantizando que los hijos desarrollen hábitos digitales saludables sin afectar su bienestar.
-La influencia de la tecnología en el desarrollo
El uso excesivo de dispositivos puede afectar la atención, la creatividad y las relaciones interpersonales. Además, el acceso temprano a contenido digital requiere que los padres orienten a sus hijos sobre qué es apropiado, alineando estos límites con los valores familiares. La sobreexposición digital puede reducir el tiempo de calidad, por lo que es clave que los padres fomenten actividades libres de tecnología.
-Acuerdos de crianza digital
Los padres deben acordar los límites y las expectativas respecto al uso de dispositivos. Un “Pacto digital” puede definir horarios, tipo de contenido permitido y reglas específicas que ambos respeten y apliquen de forma coherente. Esta consistencia ayuda a los hijos a entender las normas y el porqué de estas.
-Estrategias
Establecer horarios específicos para el uso de dispositivos y fomentar el uso adecuado de la tecnología (como con el contenido educativo) es esencial. Los padres deben modelar el uso responsable de la tecnología, evitando los dispositivos en momentos de convivencia familiar.
Incorporar actividades sin pantallas permite que la familia se fortalezca, ofreciendo alternativas a los hijos para desconectarse de lo digital.
Hablar sobre ciberseguridad, privacidad y contenidos inapropiados es fundamental para que los hijos entiendan los riesgos. Estas conversaciones deben adaptarse según la edad, promoviendo un ambiente de confianza en el que los hijos sientan que pueden expresar cualquier inquietud.
-Fomentar la autonomía digital en los adolescentes
Los adolescentes deben aprender a gestionar su propio tiempo en dispositivos y a desarrollar un pensamiento crítico sobre el contenido que consumen, especialmente en redes sociales. Los padres pueden crear un espacio seguro donde los adolescentes se sientan apoyados para hablar sobre sus experiencias digitales, fortaleciendo así la confianza en la relación familiar.
-Adaptación a un entorno digital en constante cambio
Las reglas y límites deben ser flexibles y revisarse regularmente para adaptarse a los cambios. La actualización de los padres sobre las tendencias digitales también es clave para comprender el mundo en el que sus hijos interactúan.