Mientras Petro continúa con su indetenible misión de destruir al país, ante la impotencia general sigamos nosotros solazándonos con nuestro también indetenible desarrollo. Esta vez hay que concentrarse en el litoral, que desde Puerto Mocho hasta Galerazamba se adelantan proyectos que nos ubicarán a la vanguardia del turismo social, y hasta del internacional, que uno de ellos es icónico. Se trata de la imagen de Puerto Colombia que, desde la puesta en servicio de la parte reconstruida del Muelle, y del Centro Gastronómico “Muelle 1888″ se hizo más visible la Plataforma de Atraque que luce como una isla de concreto abandonada a su suerte ante la indiferencia general.
Pero no. Existe un grupo de cívicos que preocupados por la resurrección del emblemático Muelle, permanentemente adelantan gestiones en busca de soluciones. Liderados por el ingeniero José Gutiérrez Sabatino, han acudido a las instancias nacionales, claro, sin respuestas positivas (menos ahora bajo petrismo enemigo de todo lo que tenga que ver con nosotros), y a las instancias internacionales, principalmente El Reino Unido, pues fueron los ingleses quienes se interesaron en su diseño y después en su construcción, enviaron comisiones de técnicos y montones de cemento especial y de perfilería metálica, contrataron al ingeniero cubano Francisco Javier Cisneros para que se encargara de la obra que fue llevada a feliz término, y se constituyó en la puerta de entrada a Colombia, hasta que nuestra indeclinable vocación de reversa, unos genios inventando vainas, permitió su abandono y destrucción, que la Plataforma se ha salvado por su especial diseño para resistir el embate de las olas y de los barcos atracando. Y ahí está.
Durante meses se devanaron los sesos buscando diseños ingeniosos menos costosos, pero no llegaba la musa, hasta que acudieron a la creatividad del arquitecto José Pérez Orozco, quien plantea revestirla en madera, con aspecto de embarcación de la época, una especie de nave encallada en el mar y el tiempo, a la que podría instalarse casinos, bares, restaurantes y demás. Se buscan inversionistas.
Coletilla feminista: Gran acogida tuvo la decisión de Vicky Dávila de lanzarse a la presidencia, soportada por su gran defensa a las instituciones y su oposición al petrismo, mostrando gran valentía y firmeza en sus posiciones. No proviene de élites, no está vinculada a ningún partido así que, junto con María Fenanda Cabal podrían, en el improbable caso de un proceso electoral, conformar una seria alternativa de poder.
