¿Vargas Llosa es comparable a García Márquez? ¿Las obras de este último, Cien años de soledad y El otoño del patriarca pueden compararse? ¿García Márquez era antipático? El Duro, B/quilla
Nunca, como escritor, Vargas Llosa puede soñar un paralelo con García Márquez. Eso no tiene proporción comparativa. El colombiano era un milagro de la poesía, un poeta que tuvo que ser periodista, y Vargas Llosa es un muy buen periodista e investigador que escribe buenas novelas. En mi manera de ver y por mi larga experiencia, esa es la proporción. Sobre si pueden compararse Cien años de soledad y El otoño del patriarca diría que no. Y lo digo porque Cien años de soledad contiene la belleza del relato de una estirpe, y El otoño del patriarca solo contiene la melancolía de la soledad de un tirano de verdad, de un asesino… En cuanto a si García Márquez era antipático, pues sí, tenía fama de serlo, aunque no lo comprobé porque nunca lo conocí. Muchos dicen que no tenía encanto personal, aunque sus amigos más próximos cuentan que era un conversador incomparable, que hablaba de esto y de aquello con la mayor naturalidad posible porque, además, era libremente culto. Pero a muchos sigue cayéndoles mal, pese a que fue él quien ubicó a Colombia en el mapamundi. El inglés Gerald Martin, su biógrafo autorizado, a quien entrevisté en el Carnaval de las Artes de 2009, dijo que García Márquez probablemente no soportaba estar al lado de personas consideradas en su estricto mismo nivel, y después contó que hacía cosas solo explicables por la importancia que se daba y que le daban, como revisar las listas de invitados a las fiestas donde lo agasajaban. Es decir, sus sorprendentes circunstancias lo envanecieron, una situación infrecuente para la gran mayoría de la población. Él era un personaje raro que se las jugó todas, que no concedió nada. Como quien dice: “Aquí mando yo, y se acabó el cuento”.
Para referirse a cierta dama que desvariaba, mi madre siempre decía “que estaba ‘decho’ “… Ch. Daza, V/par
‘Decho’ es acortamiento de la expresión ‘de hecho’, de uso abundante en el Cesar y La Guajira. Significa ‘ya mismo, enseguida, de inmediato’: “Le dijo que le gustaba y decho la sacó a bailar” (“… y enseguida la sacó a bailar”). “No había sido convocado, pero, cuando alguien lo saludó con un ademán, decho entró a la reunión”. (“… de inmediato entró a la reunión”). El uso más frecuente de ‘decho’ se da cuando se alude a la locura de alguien o a quien dice frases desatinadas o excéntricas o a un individuo errático. “¡Está loco de hecho!” pasó a ser “¡está decho!”.