De los compromisos de la ganadería, mi tema de la semana anterior, se desprenden las metas que orientarán la acción para 2025.

Del compromiso con la modernización y la salud animal surgen tres metas: La primera es entrar al mercado de carne en Estados Unidos, una frustración del TLC, pues nuestra leche no es competitiva en ese mercado, de donde viene el 62% de las importaciones, y aún no logramos admisibilidad para la carne. Aun así, hay conversaciones avanzadas y una actitud asertiva de los ministros de Comercio y Agricultura, y del ICA e Invima como autoridades sanitarias.

La segunda es la trazabilidad, un sistema de identificación y seguimiento de cada animal, para que el consumidor se informe sobre la carne que compra, y como instrumento de control para las autoridades sanitarias y de inocuidad, además de factor que incide en las exportaciones a mercados de alto valor.

Pero no habrá trazabilidad sin una alianza público-privada, como la que logró erradicar la fiebre aftosa. Llevamos tres años de trabajo conjunto reconstruyendo el sistema Sinigan, creado y operado con éxito por Fedegan entre 2010 y 2012 mediante convenio con el ICA, hasta que la retaliación de Santos contra Fedegan acabó tan importante esfuerzo.

La tercera es el proyecto de “corral de engorde” (feedlot) en la Costa Caribe, un sistema que concentra gran número de animales alimentados en confinamiento, con parámetros internacionales de sanidad, sostenibilidad y bienestar. El proyecto, promovido por Fedegan con apoyo de la CAF, será clave para exportar carne y animales, no solo por la oferta de estos en la región, sino por su cercanía a los puertos.

En cuanto a la crisis lechera, las propuestas al Gobierno están sobre la mesa. La inclusión de la leche en el PAE, el incentivo a la pulverización, el fondo tripartito (Gobierno-industria-gremio) para producir lácteos para sectores populares. Hoy, la investigación de Mincomercio sobre importaciones desde USA y la imposición temporal de derechos compensatorios van en la dirección correcta, pero falta mucho por hacer en el mercado local… y seguiremos insistiendo.

Finalmente, en Ganadería Sostenible la meta tampoco es nuestra. Duque prometió 100.000 hectáreas en sistemas silvopastoriles, pero no vimos una sola. Nuestro acuerdo de tierras con el gobierno también los incluye, pero igual sin resultados. Nos va mejor con el sector privado y la cooperación, pero esperamos que el Gobierno crea en lo que sería una transformación productiva y ambiental sin precedentes.

Mientras tanto, seguimos comprometidos con la transferencia tecnológica, este año con una gira técnica a Bolivia y otra al Cesar, para “aprender de los mejores” del país y el mundo.

@jflafaurie