Esta no es época para cobrar un billete, ni para adelantar ninguna diligencia, porque indefectiblemente la respuesta será ésa: ¡”hablamos después de carnavales”! Es que estamos en modo carnaval, y todo pasa a segundo plano.
Superado el susto por la salud de nuestra gran Shakira, no nos importa la eventual y divulgada sobredosis que, según se comentó en los corrillos, hizo internar en clínica a Petro. Tampoco nos desvela la toma que el petrismo adelanta sobre Ecopetrol, nuestra principal fuente de ingresos, ni los desvaríos del presidente viajando al país que en el mundo explota y exporta más petróleo, su odiado petróleo “más dañino que la cocaína”, orate total.
Hasta el miércoles de ceniza nos aislaremos, aún más, de lo que ocurre en el país andino, que por culpa de los panameños sigue siendo parte de nosotros, pues se separaron y nos abrieron, quedamos por fuera, dejándonos como estamos: aislados en términos de inversiones, de atención, y de interés.
Menos mal, se puede decir, porque Chocó, Arauca, Valle del Cauca, Catatumbo, y un par de regiones más, están peor que nosotros, parecieran pertenecer a un tercer país, están tomados por los malandros, plomo corrido e indiscriminado, las fuerzas del orden oficiales no pueden entrar, y menos controlar el territorio, más de cinco homicidios diarios, desplazamientos, pobreza, tristeza, el desastre.
Menos mal, repetimos, somos como somos, estamos en modo carnaval, y nuestros gobernantes son de otros materiales muy distintos, fíjense que cada vez que hacen alguna encuesta de favorabilidad Álex puntea lejos del segundo, y Verano se ubica en el top tres. Es que están sobrados haciendo su tarea, y la gente está contenta porque siente y constata que sus impuestos están bien invertidos.
Ahora se encuentran inmersos en el buen acontecer de las festividades en todo el Departamento; que haya armonía y seguridad; que desfiles y presentaciones fluyan sin inconvenientes; que el espíritu caribe se imponga por encima de las agresiones.
Y, claro, que la gran Shakira pueda mostrarnos el resultado de todo su esfuerzo, su dedicación, su disciplina, y su inigualable talento.
Pese a que fue importante la noticia del fallo que parece devolverle a Barranquilla el control del Corredor Universitario, habrá que auscultar qué tan mala fue tal decisión para los residentes del sector incluido, cuánto pierden en inversión municipal. Que así como Elsa les hizo de todo, fijo con Álex les irá mejor. Hay que ocuparse del tema, pero ya habrá tiempo: “¡Después de Carnavales!”