Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) la salud es “un estado de completo de bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades”. Definición que ha reemplazado la idea de salud como ausencia de enfermedades biológicas.

Hoy este concepto considera determinantes sociales y ambientales. Las condiciones y riesgos laborales requieren ser detectados, evaluados y controlados para impactar positivamente la fuerza trabajadora y su impacto negativo puede ser devastador para empleados y las organizaciones.

El deterioro de la salud de un colaborador puede tener razones relacionadas a determinantes macroeconómicos, políticos, ambientales y sociales que pueden aumentar riesgos biológicos, químicos, físicos, ergonómicos y psicosociales en los lugares de trabajo.

En salud y bienestar el mundo enfrenta riesgos que impactan contextos políticos, sociales y económicos; asociados a la cobertura en salud (vacunación, prevención y atención oportuna); salud mental (depresión, ansiedad y estrés); ausentismo, desgaste profesional (burnout) y enfermedades ocupacionales que impactan la productividad, rentabilidad y seguridad de las organizaciones; determinantes ambientales como el cambio climático, la contaminación atmosférica, urbanización; enfermedades crónicas; disparidades en el acceso a salud para personas en situación de vulnerabilidad, entre otros.

Nuestro reciente estudio “People Risk”, precisa los cinco pilares del riesgo de personas que están teniendo el mayor impacto en las empresas de toda Latinoamérica. El (85%) de las organizaciones afirma que los riesgos de salud, seguridad, agotamiento y salud mental de los empleados se mantienen como mayor amenaza. El 76% de las empresas aborda este riesgo y tiene funciones y responsabilidades para gestionarlo. El 82% de las empresas gestiona la salud y bienestar, pero solo el 49% tiene sistemas efectivos y comunicaciones en el lugar para apoyar una cultura de seguridad de los empleados. El enfoque en los problemas de salud mental de la fuerza laboral solo lo aborda el 66% de empresas.

En nuestra encuesta global de aseguradoras 2022, identificamos tendencias médicas que estarán marcando este 2023. El 55% informa un aumento en el diagnóstico de enfermedades en etapas posteriores debido a atención diferida, cuarentenas y temores de infección durante la pandemia. El 16% de aseguradoras informa que no brinda planes de salud mental. Las aseguradoras tienen un alcance limitado y las empresas sólo ofrecen ayuda telefónica al empleado.

En conclusión; el reto de las organizaciones es grande pero viable. El bienestar del trabajador determina la efectividad a largo plazo de una organización. Es necesario invertir en identificación, evaluación y control de riesgos para la salud de los empleados, así como en el desarrollo, actualización o reforzamiento de programas de salud y bienestar en este 2023 teniendo en cuenta la serie de determinantes de orden laboral que pueden impactar a los empleados.

* Director Wellness, Health & Claims en Mercer Marshos en América Latina