El 1 de abril de 2018, la Fiscalía General de la Nación publicó en su cuenta oficial de Twitter: “Recuerde que para reportar la desaparición de una persona no tiene que esperar 72 horas. Solicite el mecanismo de búsqueda urgente #MBU”. Sin embargo, cuando la familia de Brenda Pájaro fue a reportar su desaparición, le dijeron que debían esperar 72 horas. La Fiscalía tardó cuatro días en emitir la noticia criminal de la denuncia y solo hasta ese momento asignaron un fiscal para que dirigiera la investigación.

Tampoco podemos olvidar que a las 36 horas de la desaparición de la mujer, la familia le entregó a las autoridades la información del último lugar de conexión del celular de Brenda, pero tardaron casi una semana en ir a buscarla en esa zona, con tan precaria estrategia que no la encontraron. El cuerpo de Brenda, sin embargo, siempre estuvo allí, en el mismo lugar, esperando ser hallado. 18 días después de que desapareciera Brenda, el subcomandante de la Policía Metropolitana de Barranquilla, el coronel Engelbert Grijalba, declaró a la prensa que “el caso de Brenda todavía no estaba definido o tipificado aún como una desaparición forzada” y que estaban indagando sobre “su extravío, pues podría llegar a ser voluntario”.

Después de que pasaran siete meses desde la última vez que vieron a Brenda Pájaro con vida, y después de seis meses de haberla encontrado muerta, ha aparecido el nombre y el rostro del presunto homicida: Tomás Manuel Maldonado Cera, conocido por el alias del ‘Satánico’, está vinculado a unos ocho procesos por desapariciones y homicidios. Nombres de otras víctimas han empezado a registrase en la prensa y a asociarse con el autor del homicidio de Brenda. El 27 de enero de 2004, hace 15 años, encontraron el cuerpo de Yilibet Manjarrés con señales de tortura en una zona enmontada. Maldonado Cera sostenía una relación con la víctima y fue el principal sospechoso. Antes, hace 22 años, estuvo vinculado al intento de homicidio de José Luis Machado, al que trató de estrangular y dejó inconsciente.

Al parecer Maldonado creyó haber cumplido su objetivo, pero Machado sobrevivió. Maldonado le destrozó las cuerdas vocales y dejó a su víctima sin habla. Lo condenaron a 12 años en primera instancia, pero lo dejaron libre en segunda instancia por, al parecer, errores procedimentales.

No alcanzan 2.900 caracteres para mencionar el prontuario que se asocia con el presunto homicida de Brenda. Da miedo pensar que un asesino serial pueda moverse a sus anchas por Barranquilla durante toda una vida. Cómo ocurre algo así. Pues, sencillo. No buscando a las víctimas a tiempo, dejando perder el material probatorio, manejando ligeras hipótesis sobre desapariciones voluntarias y un largo etcétera. Los mismos errores que se cometieron inicialmente en el caso de Brenda. Las autoridades tienen que seguir actuando con pulso de cirujanos en el proceso contra Maldonado, no se admite error.

Desde esta tribuna, seguimos acompañando a la familia de Brenda y seguimos exigiendo justicia.

@ayolaclaudia
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