Tal parece que, a pesar de todo el esfuerzo de sus adversarios, Petro sigue creciendo en intención de votos, particularmente entre los menores de 40 años, sin decrecer en los otros rangos de edad. Gutiérrez (24 %) y Rodolfo Hernández (10 %) aparecen estancados, y Fajardo retrocede del 10 al 7 %. Igualmente retrocede Ingrid Betancourt, así como el voto en blanco y la categoría No sabe/No responde; esta última pasa del 13 al 9 %.

Los resultados de las últimas encuestas no pudieron facilitar la manipulación que algunos medios de comunicación hicieron con las anteriores. A menos de 5 semanas de la primera vuelta electoral, es poco probable que si no hay ganador en ella, se modifiquen las posibilidades que tienen Petro y Gutiérrez de pasar a la segunda vuelta. Hoy, para la primera vuelta, estos están de lejos escoltados por Hernández y Fajardo. Para una segunda vuelta, Petro los derrotaría a todos moviéndose en un rango entre 43 y 45%, frente a cualquiera de los otros tres candidatos que oscilan entre 34 y 37%.

Las encuestas referidas parecen reflejar que la mayoría de los jóvenes buscan cambios y oportunidades para su vida. Pocos votarían por Fajardo o por Hernández. Quienes tienen entre 18 y 40 años mayoritariamente votarían por Petro. Los mayores de 41 años tenderían a votar por Gutiérrez. Para la primera vuelta, tomando los rangos de edad entre 18 y 25 años y entre 26 y 40 años, Petro obtendría el 52,5 % y 41,7 %, Gutiérrez 15,7 % y 20 %, Hernández 8 % y 12,3 % y Fajardo 3,4 % y 5,2 % de los votos, respectivamente. En caso de segunda vuelta, Petro enfrentado a cada uno de los otros tres candidatos tendría el respaldo de entre el 60 y 63 % de los jóvenes menores de 25 años, mientras que los otros candidatos lograrían entre el 26 y 29 %. En las personas de 26 a 40 años Petro lograría entre el 48 y 49 % de los votos y sus contendores apenas entre el 31 y 34 %.

Así entonces, para una segunda vuelta, los votos de Hernández se redistribuirían en un 40,2 % para Gutiérrez y 22,4 % para Petro; de los de Fajardo, se iría el 58,5 % con Gutiérrez y el 18 % con Petro. De los indecisos, que no deberían ser más del 5 %, se esperaría que la mitad se incline por Petro y menos de un tercio por Gutiérrez.

Si las intenciones electorales se mantienen y los jóvenes reafirman e incrementan su lealtad electoral con Petro, este debería ganar la presidencia con alrededor del 52 % de la votación, mientras que Gutiérrez obtendría menos del 45 %. Tal como está transcurriendo la campaña, Petro se consolida como futuro presidente con una diferencia, frente a su contendor, cercana a un millón de votos; bueno, si las élites políticas respetan la voluntad ciudadana.

PD. El presidente de la República y las Fuerzas Militares deben respetar y someterse a la Constitución y la ley. Y Las Fuerzas Militares deben abandonar sus veleidades ideológicas.