Me refiero a Miami, ciudad que por muchas décadas ha sido atractiva para turistas y tiene muchos colombianos residentes. Por invitación anticipada de mis hijos me tocó el inesperado cambio de horario del vuelo AV-002, que sale de Barranquilla a las 3:00 a.m., pero las vivencias que experimenté en esa linda ciudad me hicieron olvidar este madrugón. Dentro del complejo urbano del condado de Miami-Dade, partiendo de las residencias de mis familiares y amigos, hasta las calles, y carreteras, pude observar los compromisos que cumplen sus residentes en el manejo de los residuos domésticos y otras clases de residuos o materiales fuera de servicio. En esta gran ciudad, las casas, los edificios de apartamentos y los almacenes tienen organizada la clasificación de sus residuos en dos grandes canecas o tanques de basuras, uno de color verde para la basura corriente y el otro, de color azul, para todos los materiales reciclables (botellas, objetos de plástico y vidrio, etc.). Todas estas actividades de recolección y reciclado son coordinadas en el Condado de Miami-Dade por un departamento administrativo para residuos sólidos y varios contratistas se dedican a recoger (semanalmente) estos residuos reciclables y llevarlos a una planta de clasificación donde se presentan las empresas que los aprovechan. Francis Suárez, alcalde mayor de Miami, envió a todos los residentes un calendario de recogida correspondiente al año 2018, en donde se declara comprometido con la sostenibilidad ambiental de la ciudad y a mantenerla bella. Un modelo que sugiere a nuestro apreciado alcalde del Distrito y a su plana mayor organizar el programa de recolección de residuos domésticos, siguiendo las técnicas y normas de ciudades como Miami (que es fácil visitarla) o si prefieren, la ciudad de Medellín, que tiene también programas ejemplares de manejo y reciclado.
Es de reconocer que ‘Barranquilla Verde’ desarrolla actividades relacionadas con residuos reciclables y campañas educativas permanentes, pero sería conveniente que tuviera más influencia y participación en su manejo. La cantidad y el tipo de residuos generados por la población y las estrategias empleadas para colectarlos y tratarlos influyen en muchos aspectos de la comunidad sostenible, incluyendo la salud humana, el medio ambiente, el uso del suelo y el desarrollo económico; por eso es necesario que ‘Barranquilla Verde’ amplíe sus planes y programas de manejo y control. Reconociendo, eso sí, que la recolección y reciclaje de residuos en una ciudad como Barranquilla es una tarea que enfrenta muchas dificultades, siendo su eslabón más débil la selección del material reciclable en los propios hogares y su recogida, en forma organizada, por una entidad oficial o una cooperativa. Entonces, la actual experiencia de ‘Barranquilla Verde’, con la posible colaboración de Triple A y Aseo Técnico, debe aprovecharse para establecer una política distrital de gestión integral de reciclables que incluya la dotación de tanques azules de basura, especiales para reciclables, junto con los tanques verdes de basura ordinaria, por parte de cada casa o edificio. Además, se deben reorganizar las cooperativas de recolectores que actualmente escarban por la noche los tanques en los barrios.