Cárceles nada resocializadoras. El hacinamiento en los sitios de reclusión colombianos, situación que nadie ignora, es un grave problema, no solo de humanidad que atenta contra una población carcelaria, embutida como sardinas en lata. Los espacios desbordados necesitan resolverse. Maluca herencia la que acaba de recibir la ministra de la Justicia, Margarita Cabello Blanco. Sin dinero para todo lo que se necesita proveer desde un Tesoro Público exhausto y con más solicitudes que disponibilidades. Para esos asuntos, Minjusticia tiene esos limitantes. Y conseguido el dinero, hay vecindarios que rechazan al nuevo inmueble. Pocos los quieren en su cercanía. En Barranquilla, la ocupación duplica a la capacidad instalada, a pesar de que varios juzgados, conscientes de la ausencia de espacios carcelarios normales a bastantes capturados les conceden detención domiciliaria. La Policía que arriesgó su integridad personal se desmotiva al observar que el riesgo profesional que asumieron, para poco sirvió. La ministra tiene otros campos de acción y responsabilidades en los que usar sus reconocidas experiencias. Asuntos donde el dinero escaso no detenga su acción.
Ahora más lejos. Los derrumbes de montaña en la vía hacia los Llanos Orientales, que no se sabe cuándo van a parar, tienen a la producción agropecuaria, el comercio, transporte y las necesidades hospitalarias, amenazados para 1.700.000 residentes. El acceso al gran centro consumidor de Bogotá y Cundinamarca, relativamente separado, se volvió más costoso y lento. Los efectos económicos crecientes para todos los negocios del Llano, serán sin duda deteriorantes para los índices nacionales. Los precios de los alimentos al alza, recortarán las disponibilidades de los hogares, no solo en siete departamentos abastecedores, sino en las centrales de abastos que de allí se surten. Los bancos que en vez de comprar TES (Títulos de deuda soberana) contribuyeron a financiar el agro, verán aplazadas las fechas del retorno de sus préstamos por fuerza mayor. Si a Belisario Betancur le tocó afrontar a Armero, a Santos Mocoa, a Duque lo van a golpear los efectos económicos de los deslizamientos de laderas sobre la vía al Llano.
Reconocido honor. El alcalde Alex Char ha sido seleccionado para formar parte del Consejo Asesor de su alma mater Georgia Tech, la Escuela de Ingeniería Civil de Atlanta, EEUU, famosa universidad del sur de Estados Unidos donde realizó su maestría. Pocos colombianos acceden a ese tipo de reconocimientos en el exterior. Enhorabuena para todos los suyos. También, el exitoso gerente de Ingresos, para las administraciones distritales de Elsa Noguera y Alex Char; Fidel Castaño fue seleccionado por el Ministerio de Hacienda para asesorarlos con otros expertos tributarios nacionales del más alto nivel en algunas de sus delicadas tareas.
Los estados de opinión. Toda suerte de comentarios ha despertado dentro de los opinadores en los medios, la alusión por parte del expresidente y senador Álvaro Uribe, al reconocimiento de los llamados “estados de opinión”. Le atribuyen los redactores de medios capitalinos al pensador José Obdulio, la paternidad del concepto. Parece que se nos olvidó que otro sabio jurista, el expresidente Darío Echandía, desde las páginas de El Tiempo y El Espectador, justificó el golpe de estado del general Rojas Pinilla cuando depuso a Laureano Gómez, en 1954, calificándolo como un “golpe de Opinión”. Gaviria si tiene memoria histórica y por ello actualiza conceptos.
Los tiempos no dan. Para el teatro Amira de la Rosa, la tramitología, las consultas a los futuros usuarios, la contratación de valiosos diseños, los permisos a gestionar ante el Mincultura, la demolición total o parcial, su nuevo levantamiento, las órdenes de fabricación de elementos técnicos, su ejecución y montaje, tomarán tanto tiempo que se acabará el período del gerente del Banco de la República, Juan José Echavarría, en el 2021 y el anhelado teatro aún no habrá abierto sus puertas. Además, ¿cuándo volveremos a contar con dos miembros afectos a Barranquilla o al Caribe, como Meisel y Kalmanowitz, en la Junta del Emisor para que no le den tijera al proyecto?