Compartir:

En un comienzo, muchos pensaron que el asunto era pasajero. Que esa  generación que irrumpía con ímpetu terminaría por adaptarse al entorno.

Pero a medida que pasan los años nos hemos dado cuenta que los millennials llegaron para implementar una forma diferente de ver las cosas y que la incomodidad que manifiestan cuando ingresan a las empresas dejó de verse como un capricho o como una aparente falta de compromiso.

Lo que realmente está sucediendo es que los millennials han propiciado la creación de una revolución que lleva a un nuevo orden en las organizaciones.

Amrop Top Management nos ha venido hablando de este nuevo contexto: Todos queremos trabajar por resultados, beneficiarnos de la versatilidad en tiempo y espacio que nos proporciona la tecnología. Todos queremos sentirnos realizados en nuestros trabajos y tener líderes más inspiradores y visionarios.

Es una realidad. Por eso, el llamado es a reinventarse. Y eso quiere decir, entre otras cosas, a implementar procesos de selección diferentes y a retener el talento de una manera más acorde a los tiempos de hoy en día.

El concepto de organizaciones hiper-eficientes, más productivas y generadoras de felicidad entre los empleados, es lo que estamos empezando a llamar Agile Organizationes.

En otras palabras, se trata de compañías cuyas oficinas pueden estar ubicadas en las casas de los empleados, que no se rigen por organigramas de áreas, sino por células que trabajan en torno a un proyecto común.

Que sean rápidas tomando sus propias decisiones y autoevaluándose en tiempos record para dar respuesta a su foco: el cliente.

Esta es la nueva tendencia y podemos hacer varias cosas: ignorarla, resistirnos o ser parte de ella.

Para Verónica Duarte, Socia de Amrop Top Management, estamos ante un momento crucial. 'De nosotros depende dejar de lado la resistencia, liderar e incorporar a la fuerza laboral bajo estos parámetros,  no desde lo que nos asusta o  desconocemos', asegura.

'Tener un mayor conocimiento de los gustos de las personas que gestionamos y promover que se formen equipos interdisciplinarios, interculturales e intergeneracionales es todo un reto', puntualiza Verónica Duarte.

Si al interior de las empresas las expectativas personales están satisfechas y alineadas al propósito de la organización, es más fácil el cumplimiento de las metas.