El 2020 había iniciado con buenas señales y con optimismo por la dinámica económica que se estaba avizorando, creación de nuevas empresas, los efectos de la nueva reforma tributaria, los incentivos a la inversión extranjera, los cupos de crédito para promover emprendimientos y las medidas para consolidar proyectos, entre otros, esta era la cuota iinicial de un 2020 que tenía un camino por delante. Infortunadamente y como nadie lo esperaba, a raíz del COVID-19 las cifras son preocupantes e impactan a Santa Marta y el Magdalena.
En el conversatorio Santa Marta 495 años Retos 2020-2024 organizado por EL HERALDO los panelistas Alfonso Lastra, presidente ejecutivo de la Cámara de Comercio de Santa Marta, Juan Pablo Arteaga, vicepresidente de sostenibilidad de Drummond; Alvaro Góngora, vicepresidente de operaciones del Puerto de Santa Marta; Pablo Vera, rector de la Universidad del Magdalena y Omar García, presidente ejecutivo de Cotelco Magdalena, expresaron que es necesario adaptarse a los cambios para las necesidades futuras.
Lastra se refirió a la situación actual de la ciudad y reveló que el tejido empresarial está compuesto en un 99% por microempresas y hoy día el 96% de las empresas han sido afectadas negativamente por el COVID-19.
Las microempresas son las estructuras más frágiles dentro del tejido empresarial pero al mismo tiempo las que me aportan a la dinámica económica y la generación del empleo en Colombia, el Magdalena y Santa Marta.
En materia de competitividad 'vemos una de las grandes apuestas y es salir de los niveles en los que nos encontramos actualmente, el reciente informe del Índice de Competitividad de Ciudades 2020, presentado por el Consejo Privado de Competitividad y la Universidad del Rosario, indica que debemos mejorar en varios frentes: cobertura de acueducto y alcantarillado, déficit en vivienda, empleo vulnerable, formalidad laboral y facilidad para abrir empresas; entre otros temas', indicó Lastra.
Góngora dijo que 'en el puerto arrancamos el año 2020 con expectativas muy optimistas, esperábamos llegar en el primer semestre a los 3 millones 200 mil toneladas de carga a pesar de cerrar el 2019 con los precios del carbón muy deprimidos y teniendo en cuenta que tendríamos una disminución del 40% en el volumen del carbón, confiados en un crecimiento sostenido para este año. Con la llegada de la pandemia en marzo, tuvimos que adoptar medidas tempranas como frontera internacional por el recibo de naves con tripulación extranjera, empezamos protocolos con ayuda de la capitanía del puerto y salud distrital'.
Luego adoptaron medidas de bioseguridad para el ingreso de vehículos y personal al puerto que les ha permitido operar con normalidad a pesar del creciente número de contagios por la pandemia en el país. Afortunadamente pocos casos de contagio se han presentado en el puerto. Las cargas si se han visto impactadas, el primer semestre del 2020 cerró con una disminución en arribo de motonaves casi 25 naves no llegaron y unas 300 mil toneladas de carga que dejaron de arribar.
Para el segundo semestre, el mes de julio va a cerrar con unos volúmenes por debajo del 40% de lo presupuestado. El puerto de Santa Marta tiene vocación exportadora principalmente de productos agroindustriales como el aceite de palma, banano, frutas exóticas. El año pasado en el primer semestre se movilizaron 590 mil toneladas de carga en contenedores contra 817 mil toneladas este año. Comparativamente en carga general el año pasado se movilizaron 80 mil toneladas contra 51 mil toneladas este año.
Arteaga recordó que Drummond cerró el año pasado siendo por cuarto año consecutivo la empresas con mayor volumen de producción y exportación de carbón en Colombia y eso implica una responsabilidad porque el compromiso frente al departamento, la ciudad y a todos los grupos de interés y al país mismo es mayor. 'En marzo en amparo del decreto 457 del gobierno nacional que declaró la actividad minera como esencial para el desarrollo del país esa responsabilidad se hizo mayor, para cumplir con ese mandato por encima de las circunstancias continuamos laborando en una etapa que nos llevaba a continuar y garantizar el mantenimiento y conservaciòn de las minas y la actividad de trenes, mantuvimos abiertas las operaciones ferroviarias y portuarias con el cumplimiento de los protocolos de bioseguridad derivados de las directrices del ministerio de salud y la OMS'.
Poco a poco han ido retomando las actividades y acercándose cada vez más a un ciclo de normalidad, y en este tiempo han tenido muchos aprendizajes y la palabra resilencia es una de las cosas que más a prueba han tenido que poner, pero también la adaptabilidad.
Por su parte, Vera se refirió al tema de la educación como transformadora de territorios señalando que es necesario incorporar la tecnología en muchas de las dinámicas. Son tiempos de cambio que generan adaptaciones en las organizaciones. 'En las universidades ha significado cambios muy profundos, en este tiempo hemos transformado nuestra dinámica de una forma abrupta, impensable hace 5 meses y eso es un gran avance y aprendizaje, estamos dándonos cuenta que es necesario acortar los tiempos de la investigación básica y aplicada. Esto va a llevar a que tengamos que acelerar el resultado de las investigaciones que se hacen en las universidades. Nosotros notamos el laboratorio para diagnóstico de COVID en 35 dìas, ha sido la obra màs rápida que hemos hecho'.
¿Qué ha cambiado o que va a cambiar en la sociedad luego del COVID? Va a haber cambios significativos frente a lo que significa ciertas dinámicas de la globalización y la deslocalización de ciertas actividades productivas, relocalización y cambios en el trabajo. Muchos hacen trabajo remoto y nos dimos cuenta que algunos de eso trabajos convencionales se pueden hacer remotamente. 'Hoy nos toca innovar de forma adaptativa, imaginar y creae nuevas ooprtundades para tratar de ir respondiendo a esos cambios'.
Sobre el sector hotelero y turístico de Santa Marta, Omar García de Cotelco dijo que no es la primera vez que pasa por obstáculos, siempre les toca pedalear, pero ahora les toca nadar contra la corriente. 'No es fácil ver que todos los demás subsectores han entrado en operación y nosotros ahí sin poder despegar, la cadena turística de Santa Marta tiene el 97% de los prestadores turísticos formales'.
Sin embargo tienen una agenda de competitividad turística Santa Marta- Magdalena, esta industria genera mucho empleo, hay 35 mil personas vinculadas directamente a la cadena turística, y construyeron una propuesta colectiva bajo tres temas: perspectiva empresarial, comunitaria y académica para que sea tenida en cuenta como política pública.