Con la pujanza y el liderazgo que caracteriza a las mujeres del caribe colombiano Olga Rangel y Margarita Estrada han abierto un gran camino hacia el cambio y la sostenibilidad medio ambiental.
Estas mujeres con historias de vida de superación tan inspiradoras se han convertido en un ejemplo para todas las comunidades que viven en el municipio de Sitio Nuevo, y principalmente en Palermo, corregimiento donde hace varios años atrás decidieron sentar cabeza y formar sus familias.
Margarita llegó al corregimiento en el año 2002 a causa del desplazamiento forzado que derivaba del conflicto armado, y desde su llegada, supo aprovechar las oportunidades que en ese momento el Estado brindaba a quienes sufrían por dicho flagelo.
Fue así como a través de los muchos programas sociales, consiguió ubicarse en una vivienda en el sector de Villa Palermo. Después de intentar muchas opciones de emprendimiento, Margarita se dedicó al reciclaje en el área metropolitana de Barranquilla, actividad que le permitía tener un sustento para ella y su familia.
Ella considera que desde ahí nació su gusto por el cuidado del medio ambiente, tanto así, que en el 2014 terminó su bachillerato y dos años después realizó su carrera técnica en Gestión Ambiental, a través de sus estudios y de su activa participación en iniciativas de cuidado y conservación del medio ambiente, empezó a ser considerada por organizaciones públicas y privadas como vocera y líder en esa área.
Por su parte Olga Rangel, con una historia de vida similar, llegó a Palermo en el 2002 también huyendo de la violencia de la época, desde La Jagua de Ibirico en busca de una oportunidad de vida digna, sin embargo, para ella fue complicado ya que en ese entonces, el corregimiento carecía de muchos elementos óptimos para vivir, como sistema eléctrico, acueducto y comercio de víveres y productos básicos de consumo, lo que la obligaba a ir a Barranquilla a buscar suministros y comida.
Fue tanto la necesidad y ganas de Olga de comenzar a aportar al desarrollo social de Palermo, que comenzó a participar de actividades que beneficiaban a los habitantes como un comedor para los niños, donde las madres hacían una pequeña contribución a cambio de almuerzos.
Esta líder que también había empezado a participar en campañas y actividades eco ambientales decidió comenzar sus estudios y en el 2011 y se graduó de las carreras de Técnico en Auxiliar Contable y Gestión Ambiental.
La personalidad de liderazgo de Olga también hizo que la consideraran para estar al frente de muchos programas en pro del medio ambiente, y comenzó a desempeñarse en cargos dentro de fundaciones y proyectos de educación medioambiental, incluso en algún momento fue la presidenta de Acción Comunal de su sector.